Cuando sepas
lo que se pretende aprobar en el Foro de Davos, entenderás lo del virus, lo de
China, lo de EEUU y lo de los Sánchez y su “banda”
por Eduardo
Rodríguez de Brujón y Fernández
29 enero,
2021
Masones.
Comunistas.
Marxistas.
Sionistas.
Iluminati.
etc.
La Cumbre de
Davos del Foro Económico Mundial, se va a celebrar este año su 51ª edición en
Singapur y esta vez se dividirá en dos fases: Una virtual en enero y otra
presencial entre el 13 y 16 mayo de 2021 y el lema del Foro no será otro que
“El Gran reinicio”.
Su
presidente ejecutivo y fundador, Klaus Schwab, ha pronunciado las palabras que
van a infundir de contenido el citado Foro: “ ...Una cumbre de liderazgo
mundial es de crucial importancia para abordar cómo recuperarnos juntos...”, es
decir, en román paladino: De cómo el Gobierno Mundial va a regir a la
humanidad.
Ante esta
frase eufemística, el Foro de Davos se convierte en noticia sin que ni un sólo
intelectual de talla mundial haga acto de presencia en esta reunión de seres
anodinos para los que lo único importante, es hacer público el pensamiento de
lo políticamente correcto y dominante, con el objeto de informar y formar a las
masas ávidas de órdenes, sobre lo que han de decir, sobre lo que han de opinar
y sobre que han de pensar en el próximo año y en los venideros, hasta poder
implantar la Agenda 2030.
En ese foro
no se va a generar pensamiento alguno, sino que sólo se va a transmitir aquello
que los que están detrás de todos estos seres inanimados, de estas caras
inexpresivas y tristes de CEO,s y burócratas, quieran transmitir al mundo desde
el anonimato de su poder real. El verdadero líder del Foro, el plutócrata y
dictador jefe del Partido Comunista Chino, es la verdadera estrella del Foro,
con la inestimable presencia de sus palmeros silentes Merkel y Macron,
verdaderos pasmarotes que con su presencia legitiman el socialismo real, la
masonería y el nuevo Orden Mundial.
El Foro de
Davos, es la cara amable de los que mandan en el mundo, sin dar a conocer sus
caras a la opinión mundial, cuyo objetivo es controlar a la humanidad,
transmitiendo ese dominio al Orbe con palabras sin alma ni sentido etimológico,
vocablos que forman parte del “Gran Reset” que va a destruir el pensamiento
cristiano occidental, lo que a la postre no es otra cosa que resetear de las
mentes y de las almas de Occidente una civilización de dos mil años.
Esas
palabras ridículas que llenan los discursos e intervenciones de políticos y
Ceo,s (todos unos horteras de segunda) y que las oímos a diario, forman parte
del diccionario de la Agenda 2030 y del Foro de Davos, lo que las ha llevado a
convertirse en símbolos de calidad de quién quiera ser considerado
políticamente correcto, como ejemplos veamos una muestra:
“sostenible”,
“empoderado”,
“resiliente”,
“multicanal”,
“transparencia”,
“equidistancia”,
“transversal”,
“inclusiva”,
“igualitaria”,
“populismo”,
“concordia”,
“implementar”,
“sororo”,
“diversidad”,
“inclusiva”,
“feminista”,
“interseccional”,
“calentamiento
global”,
“multicultural”,
“cohesionado”,
“migrantes”,
“heteropatriarcado”,
“eje
vertebrador”,
“arrimar el
hombro”,
”para que
nadie quedará atrás”,
“unidos
saldremos más fuertes”,
“estado
fuido”,
“enfoque de
género”,
“pactos
globales”,
“desafíos
globales”,
“cambios
estructurales”,
“brecha
salarial”,
“política
redistributiva”,
“desarrollo
sostenible”,
“protección
integral”,
“emergencia
climática”,
“entre todos
lo conseguiremos” y
”para que
nadie quede atrás” que si lo unes con “colectivo LGTBI”, la faena se completa.
Pero el
vocablo al cual nos vamos a tener que acostumbrar y que será la estrella, junto
a XI Jinping, de este 51º Foro de Davos, será el “Gran Reset“.
El
Globalismo, alentado por personajes siniestros desde organizaciones más
tétricas aun que ellos, ha aprovechado la pandemia y las medidas excepcionales
de control social dictadas por los gobiernos títeres del dictador Chino y de la
OMS que él domina, para poder gritar al mundo, que el Nuevo Orden Mundial ha
llegado y la vocera de ese Gobierno Mundial que se instaurará en el año 2030 ha
sido la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos,
Michelle Bachelet, que a modo de apertura de lo que va a ser el Foro de Davos,
en una reciente conferencia de la ex presidenta chilena celebrada el 1 de
diciembre de 2020, aprovechando un acto on line de homenaje a la Declaración
Universal de los Derechos Humanos organizado por la Gran Logia de Chile, habló
y anunció el “Gran Reset” que cacarearan las gallinas del Foro de Davos.
Estas
“Gallus Domesticus”, comandadas por el líder de la nueva potencia que va a
capitanear al mundo en la próxima década, repetirán lo que la dirigente
masónica de la ONU, que actúo como Alta Comisionada de las Naciones Unidas para
los Derechos Humanos, proclamó en su discurso ante sus “hermanos de la viuda”:
Que existe
el antes y después de la pandemia y que la covid supone, a ojos de la ONU, la
implantación de una “nueva era” basada en el principio masónico de la
fraternidad, principio que va íntimamente unido a la filantropía masónica que
actualmente se resume en: “Tenemos que vacunar a todos los seres humanos de la
tierra”.
Este anuncio
de lo que se iba a tratar en el Foro de Davos, lo resumió perfectamente de este
modo en su intervención:
“Amigas y
amigos, la pandemia de la covid 19 nos ha demostrado que el modelo de sociedad
existente construido sobre desigualdades generalizadas no es sostenible. No
podemos volver al ‘día 0’, esa es una normalidad mala, es una normalidad que
permitía un mundo tremendamente desigual” ... “lo que tenemos que hacer es esta
crisis no dejar pasar una oportunidad de hacer esto de recuperarnos mejor” ...
“Lo que nosotros hemos hablado con el secretario general [Antonio Guterres] es
que necesitamos un nuevo contrato social por una nueva era, porque el contrato
social que hasta ahora tenemos está quebrado o no está dando los resultados que
todo el mundo espera de él”... “Y para esto necesitamos y contamos con uno de
los principios masónicos, la solidaridad, la fraternidad” ... “Confío en que
podamos unirnos y actuar como una sola humanidad, porque esto es lo que
somos”...”
“Tenemos que
vacunar a todos los seres humanos de la tierra, porque mientras uno no esté a
salvo, nadie va a estar a salvo” y “por eso estamos llamando a que la vacuna
sea considerada un bien público universal”.
Tal y como
vaticinó la líder masónica y dirigente de la ONU, a través de lo expuesto en su
discurso el Foro de Davos nos anuncia la gran necesidad de la Humanidad de
recibir el “maná” de lo que viene denominándose “el gran reset” o “el gran
reinicio” que va a nacer en este 51º Foro de Davos como anuncio de la
“salvación del mundo”.
En el Foro,
los poderosos asistentes van a tener la oportunidad, ante el pasmarote de
Sánchez, de estrechar filas dando las directrices para que se pueda interpretar
desde el “Gran Reset” todos y cada uno de los acontecimientos que se van a
producir en el mundo, diseñados de antemano por el Gobierno Mundial, lo que va
a suponer dar un vuelco a la economía, a la libertad de expresión, a los conflictos
militares globales y locales demostrando como el Gran Capital va a dirigir el
planeta desde ese Nuevo Gobierno Mundial que nace de la Agenda 2030. Es decir,
la desaparición de la democracia tal y como nos la contaron.
Como hemos
dicho, el 51º Foro de Davos contará con oradores del mundo académico,
empresarial, sociedad civil y gobiernos. La agenda de Davos 2021, consta de 7
temas:
1º) Cómo
Salvar el planeta
La Tierra se
está calentando, el hielo se está derritiendo, el nivel de los océanos está aumentando
y se están llenando de plástico. Estamos perdiendo especies, acumulando gases
de efecto invernadero y nos estamos quedando sin tiempo. Es fácil que nos falte
el ánimo. Y, sin embargo, hay muchas razones para estar alegre: la consigna es
‘sostenible’ y se aplica a todas las áreas de la actividad humana: energía,
alimentos, ropa, viajes, ciudades y todo lo demás. Pero incluso si todo fuera
100 por cien sostenible, todavía habría trabajo por hacer para reparar el daño
que hemos hecho. ¿Por dónde empezar?
2º)
Economías más justas
Desde la
Segunda Guerra Mundial, la esperanza media de vida en el mundo ha aumentado 30
años. Mientras tanto, el acceso a la salud y la educación ha sacado a miles de
millones de la pobreza. Pero la desigualdad económica dentro de muchas naciones
se ha disparado, la movilidad social ha retrocedido y la cohesión se ha
debilitado. Ahora se teme que la nueva tecnología empeore las cosas. ¿Cómo
podemos reformar las economías para que el crecimiento beneficie a la mayoría y
no solo a unos pocos y para asegurarnos de que el extraordinario motor del
desarrollo humano sea sostenible?
3º)
Tecnología para el bien.
La nueva
tecnología siempre es disruptiva. Crea ganadores y perdedores, destruye unos
empleos y crea otros, e introduce un profundo cambio social. Pero la
vertiginosa velocidad y el verdadero peso de esta etapa de cambio técnico es,
en realidad, una amenaza a la definición misma de lo que es ser humano. Se nos
presenta una gran variedad de dilemas éticos. ¿Cómo unirnos para acordar las
reglas sobre cosas como los bebés genéticamente modificados, los robots de
guerra y los algoritmos que determinan nuestras posibilidades de vida?
¿Deberíamos ralentizar un poco las cosas?
4º) El
futuro del Trabajo
Cualquier
persona con un teléfono móvil puede acceder al material de cursos para obtener
un título de Harvard, participar en la “gig economy” o encontrar financiación
para su nuevo proyecto. Ese es un cambio profundo y muy reciente. Las
tecnologías que están alterando nuestras vidas económicas y sociales también
nos están ayudando a adaptarnos. Pero la historia sugiere que si lo dejamos en
manos del mercado, la Cuarta Revolución Industrial nos conducirá a un largo y
perjudicial período de discontinuidad. Podemos verlo venir, sabemos que vamos a
tener que adquirir nuevas habilidades, pero, ¿qué vamos a hacer al respecto?
5º) Empresas
más justas
Desde la
primera Revolución Industrial, las empresas han estado en primera línea del
cambio tecnológico y social. No hay forma de que creemos un mundo cohesionado y
resiliente sin ellos. Pero para hacer esto, necesitaremos que cambien sus
horizontes temporales, mirar más allá de los beneficios a corto plazo y se
transformen en organizaciones sostenibles e inclusivas. ¿Qué ha de hacer una
empresa inteligente?
6º) Futuros
más saludables
El gasto
mundial en salud ha aumentado drásticamente en la última década. Asuntos que
antes se limitaban a una consulta médica van perdiendo el peso del estigma. La
soledad, el estrés laboral, el duelo, la depresión o la ansiedad son solo
algunos de las cuestiones de salud mental de los stakeholders se están haciendo
conscientes. Las dolencias físicas también son parte del problema. La ciencia
médica ha dado grandes pasos, y la tecnología ahora promete el sueño de la
“medicina de precisión” que ya aparecía en los libros y películas de ciencia
ficción. ¿Cómo identificar y resolver los principales desafíos de salud al
tiempo que garantizamos un acceso justo para todas las personas?
7º) Mas allá
de la Geopolítica
Existen 193
naciones, una proliferación de centros regionales de poder y una realidad
irrefutable: estamos juntos en esto. La buena noticia: cuando nos lo
proponemos, realmente podemos lograr que nuestra acción internacional sea una.
Como cuando tratamos el deterioro de la capa de ozono. O cuando llegamos al
Acuerdo de París para limitar el cambio climático. La noticia no tan buena: el
nivel de los desafíos a los que nos enfrentamos exige muchas más historias de
éxito. Necesitamos pasar de la geopolítica y la rivalidad internacional a la
única posible solución de colaboración global. Las naciones van a tener que
cambiar.
La
traducción de estos puntos que coinciden con los 17 puntos de la Agenda 2030 de
la ONU, no nos deja duda alguna sobre la coincidencia de objetivos y de
protagonistas. El Foro de Davos nos va a ir indicando año a año que objetivos
anuales vamos a ir cumpliendo hasta llegar al sonado “Gran Reset” que nos
traerá el nuevo y esperado Gobierno Mundial de la “Gran Fraternidad” en el año
2030.
Los siete
puntos se pueden traducir en:
La población
mundial no tendrá acceso a la propiedad privada y la falta de propiedad le
traerá la felicidad.
El Gobierno
le permitirá y le facilitará que pueda poseer, por medio del alquiler, todo
aquello que desee.
Los únicos
propietarios serán las grandes corporaciones y los Estados, las grandes
fortunas serán más poderosas.
Todos
seremos iguales por abajo.
En vez de
conseguir que todos seamos propietarios de nuestra viviendas, los humanos no
seremos propietarios de nada y por lo tanto, seremos iguales.
Los
impuestos salvajes dirigidos a personas y Pymes, tales como el de sociedades,
sucesiones y patrimonio, serán los instrumentos para una expropiación paulatina
de la propiedad a las clases medias.
La
geopolítica mundial cambiará. China y sus países satélites serán la nueva
potencia mundial, EEUU perderá la hegemonía y el “gigante asiático, pasará a
ocupar su puesto, basando su poder en un fuerte capitalismo de estado.
Habrá
escasez de alimentos y de agua y las grandes corporaciones fomentarán la
desaparición de la carne en la dieta mundial. Se fomentará el veganismo,
facilitándose nuevas alternativas a la carne, fabricadas artificialmente por
las grandes multinacionales que controlarán la agricultura con semillas y productos
transgénicos, destruyéndose así la biodiversidad.
Ante esta
escasez de alimentos, se fomentarán los movimientos de poblaciones y la
inmigración de mano de obra barata a los países occidentales, con la excusa del
cambio climático, destruyendo las naciones estado y sus fronteras, en pro de la
gran fraternidad.
Occidente
desaparecerá para formar un Pangea territorial y racial manejado por el gran
Gobierno Mundial que nace de la Agenda 2030.
Se
destruirán todos los valores de la población occidental para poder absorber
mejor a las poblaciones inmigrantes utilizando el buenismo fomentado desde los
pocos medios de comunicación que modulan la opinión pública oficial,
persiguiéndose la libertad de expresión de los que sean disidentes, es decir,
de los europeos, heterosexuales, cristianos, patriotas y autónomos
económicamente hablando, controlando su población con el aborto y la eutanasia.
La palabra
clave será “calentamiento global” y “refugiados políticos” para favorecer la
inmigración en masa.
La implantación
de un salario mínimo, que destruye empleo y que hace que las pequeñas empresas
no puedan sobrevivir, será esencial para implantar el nuevo Gobierno Mundial.
El Estado pagará a los no disidentes, lo mínimo para alimentarse y poder
alquilar para vivir en las grandes Megápolis que se van a fomentar para
despoblar el incontrolable mundo rural y favorecer el control policial y
militar de las poblaciones apiñadas en estas ciudades.
Se
penalizará la emisión del CO2 a las naciones, criminalizando el uso de las
energías fósiles y por ende, destruyendo a las empresas emisoras de CO2, en pro
de la salud y el bienestar, potenciando los usos masivos de vacunas y con la
excusa de las pandemias que controlarán la población mundial.
Se ocultará
la verdad, que será sustituida por la verdad oficial, para poder reeducar de
las masas en los postulados que dicte el Gobierno Mundial e implantar el Nuevo
Orden por medio del Gran Reset anunciado.
Perseguirán
la historia y las noticias veraces, con Ministerios de la Verdad, implantando
una férrea censura en los medios de comunicación y en las redes sociales.
Twetter y Facebook, controlan el 80% de la publicidad mundial y son asistentes
a Davos.
La
sustitución de las naciones por las organizaciones y corporaciones mundiales
que tendrán el poder sobre los gobiernos, hará que desde el Nuevo Poder que
surja del “Gran Reset” los oligarcas del capitalismo mundial, controlarán el
comercio mundial de todo tipo de productos, de energía y de armas.
Los del Club
Bilderberg asistirán a Davos y el líder y ejecutor del nuevo líder mundial, XI
Jinping, será bendecido por los Rothschild, los Rockefeller y los Morgan, junto
a los Bill Gates, Warren Buffett, Carlos Slim, Jeff Bezos, Mark Zuckerberg,
Larry Ellison y Michael Bloomberg.
Todos estarán
juntos en Davos, para implantar el Nuevo Orden Mundial y bajo el brazo ejecutor
de la nueva gran potencia china, los grandes propietarios mantendrán su
hegemonía global, a causa de una pandemia que va a dar lugar a la Gran
Reinvención del Mundo (Gran Reset) implantándose en la Tierra el gran ideal
masónico de la Fraternidad Mundial, con la excusa de evitar que el virus
maldito vuelva a aparecer.
El gran
debate, será establecer cómo se va a neutralizar a aquellos que se nieguen a
perder su identidad, su patria, su religión y sus propiedades, lo que será el
núcleo de las nuevas disputas y enfrentamientos locales y globales que se van a
vivir en el mundo hasta el año 2030.
La nueva
pandemia mundial llamada Agenda 2030, sigue en Davos su andadura triunfante.
Preparaos para lo que la Providencia nos depara.
Participantes
en el Foro de Davos, entre otros empresarios, académicos y Ceo's de empresas
multinacionales.
XI Jinping
President of the People’s Republic of China, Office of
the President of the People’s Republic of China
Narendra
Modi
Primer
Ministro de la India, Oficina del Primer Ministro de India
Yoshihide
Suga
Primer
Ministro de Japón, Gobierno de Japón
Emmanuel
Macron
Presidente
de Francia, Oficina del Presidente de la República de Francia
Angela
Merkel
Canciller
Federal de Alemania, Cancillería Federal de Alemania
Ursula von
der Leyen
Presidenta
de la Comisión Europea
Moon Jae-in
Presidenta
de la República de Corea, Oficina del Presidente de la República de Corea
Vladimir
Putin
Presidente
de la Federación de Rusia, Oficina del Presidente de la Federación de Rusia
Alberto
Fernández
Presidente
de la República Argentina, Presidencia de la República Argentina
Cyril M.
Ramaphosa
Presidente
de Sudáfrica, Presidencia de Sudáfrica
Pedro
Sánchez
Primer
Ministro de España, Oficina del Primer Ministro de España
Guy Parmelin
Presidente
de la Confederación Suiza y Consejero Federal de Asuntos Económicos, Educación
e Investigación, Departamento Federal de Asuntos Económicos, Educación e Investigación
de Suiza
Ivan Duque
Presidente
de Colombia, Oficina del Presidente de Colombia
Carlos
Alvarado Quesada
Presidente
de Costa Rica, Oficina del Presidente de Costa Rica
Nana Addo
Dankwa Akufo- Addo
Presidente
de la República de Ghana, Oficina del Presidente de Ghana
Kyriakos
Mitsotakis
Primer
Ministro de Grecia, Oficina del Primer Ministro de Grecia
Benjamin
Netanyahu
Primer
Ministro de Israel, Oficina del Primer Ministro de Israel
Abdullah II
ibn Al Hussein
Rey de los
Hachemitas Reino de Jordania, Corte Real Hachemita
Paul Kagame
Presidente
de Ruanda, Oficina del Presidente de Ruanda
Lee Hsien
Loong
Primer
Ministro de Singapur, Oficina del Primer Ministro, Singapur
Líderes de
organizaciones internacionales, agencias gubernamentales y bancos centrales
Christine
Lagarde
Presidenta,
Banco Central Europeo
António
Guterres
Secretario
General, Naciones Unidas
Tedros
Adhanom Ghebreyesus
Director
General, Organización Mundial de la Salud (OMS)
Kristalina
Georgieva
Directora
Gerente, Fondo Monetario Internacional
Amina
Mohammed
Vicesecretaria
General, Naciones Unidas
Achim
Steiner
Administradora,
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)
Phumzile
Mlambo- Ngcuka
Subsecretaria
General y Directora Ejecutiva, Entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad
de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU MUJERES)
Dongyu Qu
Directora
General, Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la
Alimentación (FAO)
Inger
Andersen
Directora
Ejecutiva, Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente ( PNUMA)
Henrietta H.
Fore
Directora
Ejecutiva, Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF)
David
Beasley
Director
Ejecutivo, Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA)
François
Villeroy de Galhau
Gobernador,
Banco Central de Francia
Fang Liu
Secretario
General, Organización de Aviación Civil Internacional (OACI)
Anthony S.
Fauci
Director,
Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID)
Angel Gurría
Secretario
General, Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE)
Mauricio
Claver-Carone
Presidente,
Banco Interamericano de Desarrollo
Andrew
Bailey
Gobernador,
Banco de Inglaterra
Guy Ryder
Director
General, Organización Internacional del Trabajo (OIT)
Jürgen Stock
Secretario
General, Organización Internacional de Policía Criminal (INTERPOL)
Fatih Birol
Directora
Ejecutiva, Agencia Internacional de Energía
Rebecca
Fatima Sta Maria
Directora
Ejecutiva, Secretaría APEC (Cooperación Económica Asia-Pacífico)
Sociedad
Civil
Seth F.
Berkley
Directora
ejecutiva, Gavi, The Vaccine Alliance
Gabriela
Bucher
Directora
ejecutiva, Oxfam International
Sharan
Burrow
Secretaria
general, Confederación Sindical Internacional (CSI)
Hindou
Oumarou Ibrahim
Presidenta,
Asociación de Mujeres y Pueblos Indígenas de Chad (AFPAT)
Marco
Lambertini
Director
General de WWF International
Laura
Liswood
Secretaria
General del Consejo de Mujeres Líderes Mundiales
Delia
Ferreira Rubio
Presidenta
de Transparencia Internacional
Peter Sands
Directora
Ejecutiva del Fondo Mundial de Lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y la
Malaria (GF)