EL GRANO DEL SISTEMA ESPECIAL: DISERTACION EN NUCLEO SOCIAL DE ARGENTINA

 

 

      Nadie pensó alguna vez que nos iba a tocar vivir la era mas tumultuosa de la historia, no solo de nuestro país, sino del planeta. Ante esta realidad y estando en juego no solo la integridad de la Argentina, sino también la de propia raza humana es que debemos tomar una determinación, que mas que ello es una opción.

     Estudios científicos han llegado a la conclusión que entre el 7 y el 10% de la población es impermeable a la prédica del sistema; es decir, no res-ponde a las políticas de penetración cultural. Eso no significa que todos se alcen contra el régimen; la vocación de servicio y la rebeldía corren por otro lado. Pero es una masa crítica importantísima. Vamos a tratar de po-nerle un número; propongamos la de mínima, un 7%, es decir en nuestro país 3.080.000. De allí el 30% son niños y adolescentes y gente muy mayor, quedan 2.156.000. Que el 50% es de involucrarse; nos queda 1.078.000. Estamos en el Area Metropolitana Buenos Aires que tiene el 37% de la po-blación, es decir que de esa masa crítica significan 400.000 personas. Que pueden ser mas porque en ciertos lugares del interior por formación esco-lar y tradición de raza no tienen el espíritu de rebeldía. La Plaza de Mayo como está hoy revienta con 120.000 personas.

     Ahora bien, esos 400.000 o mas de población no son todos de defender los intereses nacionales, al contrario, fueron educados fuera de ese es-quema. Tenemos que buscar puntos en común.

     Hoy con el tema covid y vacunas parece que se abre una puerta. Y te-nemos que ir nuevamente a los números. Datos oficiales que no sabemos hasta que punto confiar con la experiencia anterior del kirchnerismo a la hora de las estadísticas aducen dos tercios de la población vacunada con una dosis; que baja al 50% cuando se habla de dos dosis. Acá cabe una pregunta: que pasó con esos millones que solo se inyectaron una? Cuando se habla de pase sanitario la mayoría de las encuestas da que entre el 60% y 75% no está de acuerdo. También hay que preguntar con que sector de la población se hacen las encuestas. Porque conocemos que la red de villas de emergencia es un mundo aparte donde mas que la cobertura de la va-cuna rige la cobertura del estómago.  

      Voy a dar otros datos, oficiales Ministerio de Salud de la Nación, muer-tos por covid año 2021 entre mayo y octubre; porque a partir de esa fecha cambiaron la metodología y no se determina si los muertos fueron vacuna-dos o no. No voy a dar el informe porque es largo, solo el global entre mayo y octubre. Observen la progresión en porcentajes: muertos sin vacunar: mayo 37,04%, octubre 11,95%. Con una dosis: mayo 59,26%; luego de un pico en junio del 74,67% en octubre queda igual que al principio, 59,29%. Con dos dosis: mayo 3,70%, octubre 28,76%.

      Esto es oficial, algún mercenario de la prensa o médico que pululan por los sets de televisión se lo dicen? Nosotros somos los conspiranoicos?, Quien conspira acá, sobre todo con la verdad?

     Otro dato, tengo la nota con la autorización del ANMAT donde dice cla-rito que es un ensayo. Los mercenarios del régimen dicen algo? Como nos pueden tratar de anti vacunas si esto no es una vacuna.

     También tengo un documento oficial del Ministerio de Salud donde enu-mera las vacunas que se utilizan en el país; todas tienen permiso de emer-gencia y enumera los graves efectos adversos. Hecho curioso, no está la rusa. Reitero, documento oficial. 

     Ultimo documento que cito. El Hospital Garraham no acepta donantes de sangre que se hayan inoculado algo experimental.

     Ahora bien, la Argentina no es una isla en el mundo y nuestros gober-nantes discuten los primeros puestos en lo que a cipayaje se refiere. Pero no debemos soslayar que cipayos mas, cipayos menos, ningún país del planeta está gobernado por semejantes bandas de delincuentes a todos lados del mostrador.

     Y esa es la diferencia con cualquier otro país del mundo. Aquí a la pro-blemática covid hay que agregar las autoridades de la Argentina; ya que está gobernada por una conjura política y judicial. Acá todo es posible, la constitución y las leyes nos las pasamos por donde no da el sol; se pueden robar todo lo imaginable y lo no imaginable también y nadie paga absoluta-mente por nada.

     Si se roba un paquete de arroz porque su hijo llora de hambre, estaciona donde no debe porque no puede pagar un estacionamiento o no paga im-puestos porque eligió pagar la luz; es considerado el mas ruin de los ciuda-danos y debe pagar con la cárcel, con embargos y multas; para engrosar las cajas que nuestros gobernantes necesitan para saquear.

    Desde 1983 hasta acá se han robado mas de un billón de dólares y no hay nadie preso. Algunos me citarán a Lázaro Baez, José López o Ricardo Jaime. Ellos tuvieron presos porque le bajaron el pulgar por una mejica-neada cuando murió Nefastor. Y si alguno me pregunta si los militares no robaron con la deuda que dejaron les respondo que es mejor no tocar el tema. Ellos fueron presos por otra cosa, por la deuda nadie. Y como para tomarnos el pelo, Martínez de Hoz llegó a estar detenido en domicilio por cuestión de un desaparecido, no por la entrega de la economía y el desas- tre que causó.   

    Hoy, la justicia, marcando otro record para el libro de Guiness, detiene a diez militares por la muerte de Rodolfo Walsh cuarenta y cinco años des-pués y sobresee a Cristina en tres causas por corrupción; mas claro el mensaje, imposible.

    La única política estructural de la Argentina, esa que trasciende a los gobiernos y que no se modifica con el tiempo es el tema de la deuda eter-na. Los usureros ganan mucho dinero y pagan muy bien a sus empleados.  

    Volvamos al comienzo; gran parte del planeta está sometido a una tiranía sanitaria. Pero acá también tenemos que hablar claro ante las evidencias porque después nos acusan de no tocar ciertos temas. Hace dos años que comenzó este asunto y ya podemos sacar algunas conclusiones; primera etapa covid, segunda vacunas, tercera pase sanitario.

   Primera conclusión; en la etapa del desarrollo de la pandemia no apare-ció ninguna variante del virus. En la era de la vacuna iban apareciendo nuevas cepas en la medida que necesitaban colocar mas dosis. En la na-rrativa covid estar sano o enfermo ya es irrelevante; solo importa si estas o no vacunado. Demostrando así que la enfermedad era, simplemente, el medio y la vacuna el fin.

     A mi cuando una persona vacunada contra una enfermedad me dice que puede contagiarse de la enfermedad de la que está vacunada me refleja el estado actual de una población a quien no le enseñaron a pensar y razo-nar. Y quienes se van a dar refuerzos por nuevas cepas ya están en el lími-te de la ignorancia. Un amigo de Italia me contó muy preocupado que en un ferri detectaron a uno sin el pase y lo sacaban del barco mientras los otros pasajeros gritaban: arrójenlo al agua.

     No se enojen conmigo, lo dije varias veces y lo repito; si perdemos el tiempo discutiendo con cipayos es porque no asumimos la responsabilidad que significa estar entre el 7%. El lobo no pierde el sueño por la opinión de las ovejas.

     Segunda conclusión; cuando comienzan a aparecer enfermos y falleci- dos en mayor cantidad que en el cenit de la pandemia y que el 90% están vacunados. Y leer informes del aumento de determinadas patologías vincu- ladas con los efectos adversos de las vacunas lo que a mi me provoca, tra-tando de ver el vaso medio lleno, que al régimen le está costando cada vez mas y queda muy expuesto para tratar de tapar el bosque.

      La gente que está en la calle en todo el mundo lo que reclama es justicia y libertad. Justicia es que se haga un debate serio sobre todo este tema sin impugnar a nadie; tienen que estar los mejores en la mesa. Libertad es lo que nos dijeron durante décadas que era la señal a fuego que nos diferen-ciaba del bloque comunista. Hoy, resulta que los dos baluartes de la civil-zación occidental son vapuleados y destruidos por quienes fueron votados para preservarlos. Una demostración mas de lo que es la democracia.

      Y acá debemos aclarar, siempre hay que hacerlo; estar contra la demo-cracia no significa avalar dictaduras de ningún tipo. Pero ellos deben reco- nocer que la democracia nos está llevando a la tiranía. Nos vendieron du-rante décadas que la democracia era el paraguas que cubría a todos; que era el único sistema donde había discusión y debate. Hoy, eso ha desapa- recido y es el camino mas corto hacia la tiranía. Una demostración de ello es que los países donde mejor se vivía y la gente estaba mas contenta y a gusto, hoy llevan a los disidentes a campos de concentración. Lo mas cu-rioso es que no los llevan allí por alzarse en armas contra la democracia; sino por no querer inocularse un potaje experimental que tiene una autori- zación de emergencia. Emergencia otorgada por organismos internaciona- les cuyo presupuesto está sostenido en un 60% por los laboratorios que producen ese potaje experimental.

      En 1948 en el juicio de Nuremberg no solo se condenó a los jerarcas na-zis, también resultaron condenados varios médicos por gravísimos atrope- llos a los derechos humanos. Dicho texto tiene el mérito de ser el primer documento que planteó explícitamente la obligación de solicitar el Consen-timiento Informado, expresión de la autonomía del paciente. Sus recomen-daciones son las siguientes:

I. Es absolutamente esencial el consentimiento voluntario del sujeto hu-mano.

II. El experimento debe ser útil para el bien de la sociedad, irremplazable por otros medios de estudio y de la naturaleza que excluya el azar.

V. Ningún experimento debe ser ejecutado cuando existan razones a priori para creer que pueda ocurrir la muerte o un daño grave, excepto, quizás en aquellos experimentos en los cuales los médicos experimentadores sir-ven como sujetos de investigación.  

IX. Durante el curso del experimento, el sujeto humano debe tener libertad para poner fin al experimento si ha alcanzado el estado físico y mental en el cual parece a él imposible continuarlo.         

X. Durante el curso del experimento, el científico a cargo de él debe estar preparado para terminarlo en cualquier momento, si él cree que en el ejer-cicio de su buena fe, habilidad superior y juicio cuidadoso, la continuidad del experimento podría terminar en un daño, incapacidad o muerte del sujeto experimental.

      Vamos a ser claros de una vez por todas, si vamos a tirar a la basura el Juicio de Nurenberg hagámoslo de forma completa o que nos expliquen las excepciones y privilegios. Lo mismo por los campos de concentración; por qué aquellos eran siniestros y estos no?

     No debemos dejar de mencionar que nuestro país ha firmado tratados que desde 1994 tienen rango constitucional que prohíben absolutamente todo lo que están haciendo. Y la vicepresidente actual tuvo una actuación relevante como constituyente en la Asamblea de reforma de 1994; ahora quiere borrar con el codo lo que escribió con la mano. 

     Y llegamos al siglo XXI y debemos preguntarnos el motivo por el cual no hemos logrado constituir un movimiento que abarque como mínimo esos cientos de miles que cité anteriormente. O si, realmente están, como no se pueden juntar.

     Esto vamos a atacarlo por varios lados. La Argentina durante décadas en su etapa inicial era una confederación de caudillos. Cada provincia te-nía el suyo y a su muerte o desaparición venía otro. Es nuestro sello.

     Lo curioso es que después de la caída de Rosas, Buenos Aires declara una guerra a muerte a los caudillos provinciales llevada adelante por un caudillo porteño como era Mitre. Y el plan de la generación del ´80 que rige hasta hoy fue impuesto por otro caudillo, Julio Argentino Roca, que era tucumano y no porteño; lo digo por algunos distraídos a la hora de buscar culpables.

     Se podía eliminar el caudillo provincial, pero no se podía extirpar el mo-delo caudillista del resto de la gente. Los Peñaloza o los Varela fueron reemplazados por los caudillos del régimen.

     Para no ir tan lejos y analizar nuestro presente, pregunto: qué caudillos o líderes carismáticos tuvo el siglo XX? No voy ni a comparar ni a desarro- llar una escala de valor, solo cualificar el hecho. Yo creo que Hipólito Yri-goyen, Juan Domingo Perón; y por debajo de los dos, cualitativamente, Raúl Alfonsín. Ahora bien, cuánto duró el período Yrigoyen? Mas o menos 28 años, desde 1895 a su muerte en 1933. El de Perón 31, desde 1943 a su fallecimiento en 1974. Es decir de la muerte de uno a la aparición del otro pasaron diez años.

    Alfonsín desde 1983, es decir nueve años de la muerte de Perón, a la elección de De la Rúa, 16 años. No lo tomo hasta su muerte porque los dos anteriores gravitaron hasta el final, en cambio Alfonsín su última acción política fue colaborar para el ascenso de De la Rúa y desde allí, teniendo en cuenta lo acontecido en 2001 no gravitó mas.    

    Estamos hablando de 2001, comienzo del siglo XXI; ya pasaron veintiún años sin que haya aparecido ningún líder carismático que lleve la nación hacia el destino que él quiera imponer. Si pretendemos que se nos acer-quen chicos jóvenes, todos nacieron en el siglo XXI con un celular en el bolsillo y una computadora en su bolso escolar.

    Hago esta reflexión, y acá es cuando comienzo a generar enemigos. Nuestra generación, la de nuestros padres y abuelos crecieron y lucharon siguiendo líderes de carne y hueso y pretendemos que los jóvenes de hoy que son el alma de la revolución hagan lo mismo siguiendo estatuas de bronce.

    En tanto mantengamos esa distancia con las nuevas generaciones se-guiremos avanzando un casillero y retrocediendo tres en el juego de la O-ca. Pero hay algo mas que es sentido común; y otra vez aclaro que no abro juicios de valor. La lucha que puede haber iniciado Hitler, Mussolini, Fran-co, Yrigoyen o Perón no es la misma que tenemos que librar hoy; ni sus ideas pueden aplicarse ahora. De la historia se aprende para no repetirla. La historia no es el culto de las cenizas sino la preservación del fuego. Y la preservación del fuego se logra continuando la construcción de la historia, no desempolvando estatuas.

    Porque si nosotros para actuar debemos remitirnos a cien años es por-que no hemos construido nada nuevo acorde a este momento histórico. Al-gunos me dirán, el enemigo es el mismo. Y la respuesta es: lo vamos a combatir del mismo modo que fracasaron los anteriores? Vamos a cometer los mismos errores?

    Les planteo una diferencia substancial de nosotros con el comienzo del siglo XX. Hoy, observando el mapa del covid y las vacunas a nivel global, lo que se nota de inmediato que es un ataque violento a la cultura occidental. Los países mas cerrados y que mas presionan a la población son los que representan la cultura occidental que nació en Europa. Aquí ya hubo un primer avance con la Segunda Guerra. Antes de la misma el mundo estaba liderado culturalmente por Italia y Francia y, económicamente por Alema-nia. Al finalizar, la no cultura norteamericana barrió con todo hasta que le instaló Disneylandia en Paris.

     Hoy, segunda etapa de ese plan de destrucción de culturas. Cual es el símbolo de esa cultura occidental? La raza blanca, señores. Con la inmi-gración africana y asiática descontrolada, el poco crecimiento de la pobla-ción autóctona tras la presión mediática y ahora con la vacuna es la imple-mentación del Plan Kalergi. Ahora bien, el plan fue esbozado en 1923; te-nían conocimiento en ese momento los líderes europeos? No; nosotros ahora sí y lo estamos viendo llevado a la práctica. Vamos a seguir aferra- dos a ideas de hace 90 años?

    Hoy, Europa está siendo atacada por todos los flancos; pandemia, in-migración, amenazas de guerra. Vamos a seguir atados a ese carro o va-mos a cambiar para ser colonia china? Cuando América Latina se va a po-ner los pantalones largos, y dejar de ser furgón de cola? Esta es una etapa mas de la lucha por la independencia; en tanto no nos percatemos de ello seguiremos discutiendo lo que el sistema nos propone. Si esta vez no va-mos por todo, fracasamos. Creo que estamos bastante bien informados para darnos cuenta de ello.  

    Este es un encuentro nacionalista; ahora bien, tenemos en claro el con-cepto de nación? Para muchos es perímetro y bandera; para otros Dios, patria hogar. En el medio hay millones de personas en un país de inmi-grantes ya que no existía una población aborigen muy numerosa. Inmi-grantes, la mayoría europea que conformaron alrededor de treinta colecti-vidades.

    Vamos de vuelta a los números para observar que nación se estaba formando en los finales del siglo XIX. El primer censo de 1869, cuando aún no había llegado la gran inmigración contaba 1.900.000 habitantes. El se-gundo fue en 1895, veintiseis años después; si agregamos un crecimiento alto 3% anual (35% mas de lo que se considera hoy bueno) deberíamos ser 3.300.000, la realidad es que fueron 4.100.000. Es decir entraron 800.000 personas. Donde quedaron esas personas? La ciudad de Buenos Aires pasó de tener 136.000 habitantes a 781.000; es decir el 80% quedó en la ciudad, que tenía mas extranjeros que autóctonos.

     El tercer censo fue en 1914; si seguimos con un crecimiento alto debe-ríamos ser 6.400.000; el censo dio 7.800.000, es decir 1.400.000 mas. Bue-nos Aires pasó a tener 2.035.000, es decir 1.254.000 mas, el 90% de los ingresos. Resumiendo, en 45 años la ciudad de Buenos Aires pasó de tener el 7% de la población total al 30%. Hoy tiene el 37%.

     Estamos hablando del Area Metropolitana; si tomamos la provincia de Buenos Aires y la Capital Federal tenemos el 50% de la población del país en el 10% del territorio. Alguien puede definirme la idiosincrasia de la na-ción argentina? Pero hay otro dato a tener en cuenta; la calidad de los in-migrantes; cuando acontece la primera guerra, menos del 3% regresa a combatir por su patria.

     Nuestro país estuvo poblado por tribus nómades que eran recolectores y cazadores, que aportaron poco a la cultura nacional. Salvo en el noro-este que estuvo bajo la influencia inca; pero convengamos, era el patio tra-sero del imperio. En el noreste los guaraníes estaban un escalón encima del resto, no mucho mas de ello. El mestizaje se produjo entre esa clase europea y esa clase de aborigen.

     Y acá sigo generando amigos, la América hispana que tanto añoran fue sepultada por el aluvión migratorio. Debido a ese impresionante crecimien-to de la población de Buenos Aires, a fines del siglo XIX y comienzos del XX había mas italianos que españoles. Y sabemos que, a pesar de tener la mis-ma religión, la idiosincrasia de ambos es muy diferente. Y no estamos con-tando las otras nacionalidades europeas con otra cultura y religión y el alu-vión sirio libanes de principios del siglo XX.

    De toda esa melange salió la raza argentina con sus particularidades. Hay un hecho no difundido por la historia que explica que la cosa aquí tiene sus tiznes propios. Durante la semana trágica de enero de 1919, el go-bierno (y esto pasó en todo el mundo) reaccionó pensando que dos años antes se desarrolló la revolución bolchevique. En medio de los enfrenta-mientos con la policía, gente no preparada mezcló todo y metió en la mis-ma bolsa anarquistas, bolcheviques, maximalistas, rusos e israelitas. Entre los muertos hubo varios inmigrantes judíos recién llegados que venían huyendo de la revolución rusa; cayeron junto a sus victimarios. Estamos hablando de la ciudad que recibió el 85% de la inmigración; no es un hecho menor a la hora de hablar de nacionalismo.

     El nacionalismo argentino tal como se lo conoce tuvo su origen en la Li-ga Patriótica Argentina, fundada por Perito Moreno, Monseñor de Andrea, Tomás de Anchorena y Manuel Carlés, quien fue abogado de Marcelo T. de Alvear, un liberal anti yrigoyenista. Lo que significa que desde sus oríge-nes se apartó de las luchas populares. En la revuelta obrera de Vasena proveyó los rompe huelgas que generaron toda la represión. A la caída de Yrigoyen el único enfrentamiento armado fue entre un grupo de naciona-listas de Carlés y otro de radicales en el Congreso. Es decir, apoyaron el golpe de 1930 que trajo la década infame de la entrega a Inglaterra y de-rrocaron a un presidente que estaba por aprobar en el Congreso la nacio- nalización del petróleo propuesta por el general Mosconi.

    Para cerrar el círculo, quien denunció y combatió el Pacto Roca-Runci-man no fue ningún nacionalista, sino alguien con vergüenza del mismo ré-gimen, Lisandro de la Torre, perseguido por la Iglesia Católica.

    Para muchos el nacionalismo resurge con Perón y la base es el famoso slogan Braden o Perón, patria o colonia; luego que el embajador norteame-ricano escribiese el famoso Libro Azul. Ahora bien, Braden estuvo traba-jando en la Secretaría de Estado en el cuarto piso, que es donde está la co-cina. Después del affaire de la Argentina Braden dejaba Buenos Aires para suceder a Nelson Rockefeller como secretario asistente de Estado; al año siguiente es nombrado en un cargo especial para todo Centro América. Ninguna sanción del gobierno americano; ningún embajador intercede de tal modo en la política interna de un país sin el visto bueno de la Secretaría de Estado. Si Perón lo sabía, no se. La realidad era que la fórmula oposi-tora ultra conservadora con Tamborini vinculado a negocios con Inglate- rra y que participó en la represión de Vasena; y Mosca, ex gobernador de Santa Fe, responsable directo de la brutal represión en la Forestal no re-sistían el mínimo embate de sindicatos en manos de la izquierda. Y eso, luego del Pacto de Yalta era intolerable para Estados Unidos.

      Y contra la historia no se puede. En 1948, un joven Fidel Castro reclutado cinco meses antes por la CIA creada por Rockefeller, junto a un grupo de cubanos generan los disturbios conocidos como El Bogotazo, in-cendiando la ciudad para sabotear la creación de la OEA y transformarla en lugar de la unión americana en un organismo de lucha contra el comu-nismo. Lo curioso es que Castro y sus compinches huyen desde el centro de una Bogotá incendiada al aeropuerto en un auto de la embajada argen-tina.

      Algunos dirán, Perón fue derrocado. De acuerdo, ya se había hecho el trabajo; el justicialismo era el único movimiento popular del continente que no era de izquierda. Por otro lado se habían firmado los acuerdos de Bre-tton Woods y se había fundado el Fondo Monetario; en 1954 nace el Grupo Bilderberg y se establece el Nuevo Orden tras la guerra. Además, en el de-rrocamiento hay algo extraño; el mismo gobierno asesino que no tuvo nin-gún empacho en bombardear la Plaza de Mayo y matar 400 inocentes y un año después fusilar militares en una cárcel y civiles en un basural tiene miedo de abordar un barco paraguayo en puerto, permitir el trasbordo a otra nave y autorizar la salida de un hidroavión?  En 1958 el régimen dicta-torial de Aramburu financió, entrenó y apoyó la invasión al Paraguay desde territorio argentino de un comando militar que atacó el 1 de abril la local-dad de Coronel Bogado, causando la muerte de un número nunca determi-nado de ciudadanos paraguayos, con el fin de anular la influencia brasile-ña en la dictadura del general Alfredo Stroessner. Hicieron esto y no se animaron a bajarlo de la cañonera?

     Desde el final de la segunda guerra las operaciones políticas y militares de envergadura continental, en Latinoamérica se manejan desde Washing-ton. Perón regresa a la Argentina en 1972 de la mano de la masonería, per-sonificada en Liccio Gelli, gran maestre de la Logia Propaganda Due; quien financia el viaje y antes de partir de Madrid habla con Henry Kissinger. Ojo, es el mismo Liccio Gelli que en 1981 en la ceremonia de asunción de Ro-nald Reagan estaba sentado en primera fila.

     Hubo gestos nacionales en Perón?; si, los mismos que Yrigoyen. Pero también debemos tener en cuenta que la mejor y mas rápida forma de a-glutinar población alrededor de un líder es con propuestas nacionalistas, que tocan el fondo mas íntimo de cada uno. Pero eso el sistema lo sabe, y bien. Si Perón fue afín o lo manejaron hay que estudiarlo. Yo no quiero en-trar en detalle de lo acontecido hace noventa años con el acuerdo Haavara porque no viene al caso y es para generar mas discordia.

    Tampoco podemos obviar que Perón es presidente con el aparato del Partido Laborista y un par de años después encarcela a la cúpula del mis-mo, entre ellos a Walter Berberaggi Allende, quien veinte años después pu-blica el libro sobre el Plan Andinia y otro sobre un nuevo modelo económi- co soberano e independiente. Otro de los dirigentes detenidos fue Cipriano Reyes, quien se asegura que fue el iniciador de la marcha hacia la Plaza de Mayo el 17 de octubre de 1945.

    Algunos me dicen: la base peronista es nacionalista. Llevó al gobierno a Menem y los Kirchner; las dos puntas, ni yankees ni marxistas. Y pocos se pusieron colorados. Y es muy probable que los que se pusieron colorados estén con nosotros, y no son tantos.

   Y si hablamos de la Iglesia Católica, con quien transó para derrocar a Perón? Hace falta recordar quienes concurrieron a la marcha de Corpus Cristi en 1955 o preguntar si alguna vez excomulgaron a Aramburu y Rojas por el bombardeo a la plaza? Me van a responder que abandonaron a Pe-rón por la sanción del divorcio? Hicieron alguna manifestación contra Alberto por el aborto?

     En 2002, en una de las primeras marchas del orgullo gay; un buen grupo nos parapetamos detrás de las vallas para defender la Catedral. En cuanto se acercaron y nos vieron con los fierros y palos recularon. No había un solo cura con nosotros; al preguntar el motivo, la respuesta fue: orden de Bergoglio.     

     Otro engaño fue el gobierno de Onganía, era azul, es decir nacional. A los cuatro meses de asumir arregló con los liberales, luego que un grupo de nacionalistas le preguntó por los que iban a ir presos tras el golpe.

    Con Onganía vino la guerrilla. Los secuestradores de Aramburu tenían diez y siete ingresos en el libro de entrada del Ministerio del Interior y le habían quitado la custodia una semana antes. Varias veces hablé en el pro-grama de la complicidad del gobierno de Lanusse con la fuga de los terro-ristas del penal de Rawson y las muertes en Trelew una semana después. Es muy complicado tener memoria y estar informado.

     El mensaje que quiero dejar con todo este relato es que observen como se mueve el enemigo para que no nos engañe mas. Debemos construir al-go nuevo, que sea una mezcla de pasado y presente; lo bueno de cada eta-pa. No todo lo pasado fue bueno, no hubiese fracasado. Y no todo lo pre-sente es bueno, de lo contrario no estaríamos aquí para ver que podemos hacer.

     En este momento de mucha convulsión donde se cruza la problemática clásica de la Argentina de los últimos cincuenta años con la pandemia glo-bal. Lo que significa que en el derrotero vamos a tener una compañía di-versa en el que se mueven por distintos motivos, los cuales no todos son recurrentes a todos.

      Debemos efectuar una radiografía de la situación real del país y com-primir la problemática hacia tres o cuatro hechos fundamentales que los abarque a todos. Entre los que militamos en este sector no es difícil encon-trarlos. Con los que se movilizaron por la pandemia debemos conversar para ver hasta donde llega su información y tratar de conectarlos que solo se puede solucionar ese problema dentro del esquema de lucha que veni-mos llevando en política. Y hay un punto de unión entre ambos sectores; el mismo cipayaje con que se viene entregando el país hace cincuenta años fue puesto al servicio de los grandes laboratorios. Por lo tanto la salida es la misma, sacarnos de encima a los cipayos y mercenarios.

     También se pueden acercar de otras ideas políticas y credos que estén hartos de la decadencia argentina. También habrá que hablar y consen-suar. No somos tantos como para ponernos demasiado exquisitos. Tene-mos que establecer límites como una base innegociable: Integridad terri-torial, independencia política y económica, libertad e imperio de la justicia. Quien reconozca esto es compañero de lucha.  

     Un punto de partida, y ténganlo bien claro; no debemos polemizar en ab-soluto con los que no quieren entender razones; es perder un tiempo que no tenemos, contaminarnos y arriesgarnos a que nos denuncien. Se quie-ren vacunar, adelante. Y a nadie le debe importar sentimentalmente. La guerra la ganan los guerreros, y los guerreros tienen el corazón duro y la mente fría. En la guerra los países que triunfan honran a sus caídos, no los lloran. Están compenetrados que es el precio a pagar para llegar a la vic-toria.

     Debemos renovar las relaciones; conectarse con personas reales que viven en la realidad y alejarse de los viejos amigos que son seguidores deli-rantes y conformistas crédulos.

     Otra cosa es ser inteligentes; hoy todos tienen un celular encima. Cada vez que salen a la calle y alguien rompe el plan gritando, insultando o agre-diendo; filmen y saquen fotos. No podemos hacernos cargo de culpas aje-nas y debemos descubrir a los infiltrados. Nosotros somos los enemigos públicos número uno, el objetivo del régimen; eso lo debemos tener recon-tra claro.

     Vamos a ser un problema para el régimen cuando nos manejemos con inteligencia y mente fría. Están acostumbrados desde siempre a moverse con calentones. Un hecho solo como muestra. Hitler estaba preparando la invasión a Inglaterra; los británicos enviaron una cuadrilla a bombardear Berlín. Era la primera vez que se atacaba población civil y los daños fueron mínimos. Hitler, en lugar de seguir su estrategia decidió atacar Londres. Cuando se percató que los pilotos que eran bombardeados caían prisio-neros, ya era tarde. 

     El régimen ya está yendo demasiado lejos violando absolutamente todo; mintiendo y ocultando como nunca lo hizo. Y debemos machacar allí con golpes bajos. Para ello estamos bien informados del tema que sea y debe-mos ir con preguntas y cuestionamientos que no tengan respuesta dentro del esquema jurídico vigente. Hay que dejarlos en evidencia, que su res-puesta sea una barbaridad o rechazar el debate. Tenemos que afilar los medios de comunicación que poseemos, las redes sociales y publicar cada respuesta que nos den.

     También debemos comunicarnos con todos los que tienen espacio en cualquier medio para que difundan. Si no lo hacen es una forma de cono-cer quien es quien y para quien trabaja. Punto fundamental en esta guerra, quienes son los leales, quienes los acomodaticios, quienes los traidores y quienes los mercenarios.

     Hay que centralizar el mensaje en un grupo que tome la idea y le de for-ma. Concentrar eso en un grupo de Telegram muy cerrado. Quien quiera ingresar deberá demostrar que es de confianza. Aprendamos del enemigo, son expertos en el tema logias.

     Hay mucho en juego, mas de lo que muchos pueden suponer. Una cosa que debemos tener asimilada es que, posiblemente, no lleguemos los que comenzamos. Hoy, esto es menos complicado que hace dos años, ya que el régimen nos asegura la muerte a mediano plazo.

     Estamos ante la mas férrea tiranía, no hay ninguna garantía constitucio-nal; los ciudadanos estamos solos e indefensos. Tenemos solo dos armas para combatir por nuestra supervivencia, unión y organización.

     El enemigo se concentra en un grupo de psicópatas delirantes que son capaces de hacer cualquier cosa. Y si no metieron una epidemia que mate mas gente es porque están disfrutando del espectáculo. No nos olvidemos que son oscurantistas que hacen sacrificios humanos. El poder genera mucho mas placer que el dinero.

     Y nunca debemos olvidar que el enemigo programa a distancia y que ningún hecho es aislado, todos tienen relación, aún a décadas de distan-cia. Analizando la historia se observa clarísimo cuando estudiamos algo que su punto inicial se realizó cuarenta o cincuenta años atrás. El día que nosotros hagamos lo mismo comenzaremos a tener posibilidades de victo-ria porque los tomaremos de sorpresa y no conocerán la totalidad de nues-tro plan. La clave en esta guerra es mente fría y tomar la iniciativa. Esta-mos en el momento justo con un planeta en efervescencia y un modelo que se cae.

     Quiero terminar con una frase del científico alemán Robert Eberthardt: No temas a tus enemigos, en el peor de los casos te matarán. No temas a tus amigos, en el peor de los casos te traicionarán. A los apáticos debes temer, porque no matan ni traicionan, pero gracias a su apatía silenciosa, existen en este mundo la traición y el asesinato.