464 –
CONTENIDOS
Recuerden que entre los comentarios del
programa están los links de Bitchute y lbry.tv
de El grano del sistema 463: Covid, la catástrofe oculta
Les recomiendo la entrevista de El Tercer
Ojo al doctor Diego Martinelli, cuyo enfoque de la salud es totalmente
diferente. El reportaje viene en dos bloques, téngalo en cuenta.
También recuerden que los textos los
encontraran en reconquistatv.blogspot y una vez allí Contenidos Programas.
USTEDES Y
NOSOTROS
La intuición humana nos ha hecho huir
siempre de las criaturas capaces de desarrollar ve-nenos. Instintivamente hemos
condenado, con odio atávico y auto preservativo, las propieda- des insano malolientes
de dichas substancias tóxicas, facultadas para provocar terribles sufri-mientos
e incluso la muerte.
El largo recorrido de la vida ha expresado
seres con la aptitud de generarlos y, entre ellos, son los ofidios quienes
destacan sobre los demás. La especie que se arrastra y serpea ha me-recido los
nombres populares de: víbora, serpiente, culebra y bicha. Su ponzoña interrumpe
la normal comunicación entre tejidos, los disuelve y destruye. Es, por tanto,
particularmente ati-nado semejarlos, mediante artilugio metafórico, a nuestra
clase dirigente (oligarquía financiera internacional) y en especial a sus
administradores hediondos (subclase gobernante local) que se desempeñan como
representantes políticos y dignatarios en los tres poderes del estado de la
república, la cual fue asumida como forma de gobierno por nuestra amada nación.
Éstos in-térpretes de la voluntad popular, siempre dispuestos a torcerla y
enviciarla para su beneficio y el de sus amos, engendran un mortífero sutil: la
ideología de lo uno pragmático relativista, ho-mogeneizante y postmoderna que
cumple, como todo veneno, oficio disolvente, incomunicante y destructiva en un
tejido muy especial, el tejido social de nuestra patria, mediante su dialécti-ca
excluyente, alienante y auto perceptivista. Una dictadura débil onanista que
hace de lo hu-mano la sombra de un pellejo sin alma ni voluntad propia.
Si toda la serie de nuestros descendientes
no forma más que un inmenso ser, ha de sufrir grande vértigo el individuo que,
clavado al sólo influjo de su yo, se hunda, se fracture y se expli-que desde su
aislada y fragmentada óptica auto perceptiva. Ese ego primigenio, disociado y
antisocial sólo puede reconciliarse, reencontrarse y sanar en su cultura, en su
núcleo familiar, en su gen, en su nación. Esto es, bajo la certeza que otorga
la luz antigua que mana del motor generatriz de las tradiciones, de los
antepasados que nos interpelan, donde se manifiesta el pasaje de lo abstracto a
lo tangible, entre la idea y lo posible. Las generaciones previas a las
nuestras no nos han legado sólo un territorio sino también un particular
sentir, percibir e inter-pretar una cosmovisión que atraca en sus dominios.
Este es el suero antiofídico con el que robustecer a las próximas generaciones
de argentinos frente a tanta insensatez, perfidia, capitulación y entrega. Como
reza el canto popular: El árbol de malas
raíces da malos frutos y el nuestro, a fuerza de torcer raíces, nos da
frutos cada vez más amargos que debemos tragar diariamente.
Para bucear un poco en nuestras desdichas
y sus causantes, no pretendo hacer perder el tiempo a nadie refiriéndome a los
ladronzuelos de poca monta y de baja estofa, que medran en los más variados
sectores políticos argentinos. Esos traficantes de influencia, y de otras
cosas, que a veces obran de aplaudidores y otras veces de simples felpudos del
poder político de tur-no, no merecen ni mención. Basta con lo que son,
sabiéndose que lo son. Prefiero, en cambio, elevar la vista hacia las cúpulas
partidarias adoctrinadas bajo la teoría del servilismo y la man-sedumbre, disfrazados
bajo múltiples mantos ideológicos: el igualitarista, el libertario, el revo-lúcionario
congresista de café, el reformista, el paternalista y el bonapartista; que
comen todos de la mano del mismo amo y son, sin duda, ofidios de cierta
peligrosidad.
Dichas cúpulas dirigenciales anidan tanto
en los partidos políticos tradicionales como en los más novedosos y de reciente
aparición, que obran de caza bobos para los primeros. Los parti- dos políticos,
desde donde se estructura la representación del poder ciudadano, son un gigan-
tesco tamiz y los poderes del estado, su sello de goma.
De izquierda a derecha son entidades
legales a fin de filtrar y seleccionar de entre sus filas aquellos candidatos
que mejor expresen y simulen la derrota nacional. Se prestan, junto a o-tros
actores sociales, para introducir la ponzoña postmoderna, la homogenización
social y el olvido de la jerarquía existente entre los valores sociales y
tradicionales de carácter natural, a fin de allanar el camino hacia una
dictadura globalista de carácter colectivista que obligue al disidente (léase
persona de pensamiento propio y crítico) a aceptar sus preceptos y objetivos
sustentables bajo apercibimiento leguleyo, por presión social o por métodos
inconfesables.
El futuro es cual colmena de abejas, donde
la reina será una avispa y los zánganos los buró-cratas del partido que viven a
expensas de las abejas obreras. O tal vez un hormiguero profun- do y obscuro,
donde las hormigas tributan sus larvas frente al verdugo que las gobierna.
Un rol antisocial y antinacional cumplen
satisfactoriamente los ministerios de educación que siendo instruidos por
organizaciones supranacionales o por diversas organizaciones no guber-namentales
(altruistas todas), imponen verticalmente en las instituciones de enseñanza
prima-ria, media y superior las toxinas vinculadas al nuevo orden mundial.
Otro papel insustituiblemente relevante lo
cumplen los medios de comunicación masiva y las diversas redes sociales que
pertenecen o tributan a la élite globalista, que es el poder dentro del poder
visible.
Causa bochorno y repugnancia ver a
nuestros representantes subir a la tarima periodística donde actúan para
promocionarse y, así, poder venderse como los nuevos esclavos de la post democracia.
En los escenarios del prostíbulo periodístico instituyen la mentira y la
blasfemia como certidumbres únicas y auténticas, para luego poder ser electos
como los nuevos barra-bases del relativismo histórico y de la sinarquía
saqueadora del pueblo argentino, que al ele-girlos acepta los grilletes de la
sumisión, la ignorancia, la bastardía, la pobreza y la impotencia. De tal modo
que, en cada acto eleccionario, estamos obligados a sufragar en calle muerta,
sin prospección; a votar para elegir por el pescado que, en apariencia, esté
menos putrefacto a sabiendas que éstos siempre se pudren primero por la cabeza.
Los que han ocupado cargos electivos o
judiciales de cierta jerarquía deberían avergonzar-se de lo que han sido y de
lo que son, de lo que han hecho y de lo que hacen puesto que no ha-brá clemencia
ni piedad en la venidera historia patria.
Han hecho de los últimos cuarenta años un
desperdicio de oportunidades, han malogrado la esperanza de los ciudadanos, han
postrado vergonzantemente a nuestro país y, lo que es peor aún, se han
enriquecido con su traición. Han hecho de la democracia sólo una palabra hueca
que en sus bocas resuena sin relevancia ni significación alguna.
Ustedes, culebras, representan al Foro
Económico Mundial de Davos y al Foro Social de San Pablo, ambos atravesados
transversalmente por los mismos principios globalistas, sustenta- bles y
disolventes de naciones, financiados por la misma élite sinárquica, aunque
parezcan antagónicos ante los ojos hipnotizados de sus respectivos
representados. Ustedes, serpientes, nos han entregado a la Comisión Trilateral,
a Blackrock, al Vanguard Group, a los Fondos Bui-tre, a la CIA, al Mossad, y al
MI6.
Ustedes, raza de víboras, nos han vendido
a la Rockefeller Foundation, al G.A.V.I. y a los grandes laboratorios, a la OMS
y a la ONU, a Chevrón, al Chase Manhattan Bank, a la Barrick Gold, al J. P.
Morgan y al Citigroup, al Deutsche Bank y al Societé Générale, al BID, al Banco
Mundial, al FMI y al Club de París.
Ustedes, fariseos untados, son la
Federación Internacional de Planificación Familiar y el aborto, el feminismo
radical, el lenguaje inclusivo, Amnesty Internacional, Greenpeace y la nueva
religión verde del falso ecologismo iniciado por Al Gore, la masonería
internacional (de la cual son miembros), la Open Society y subscriptores del
Memorandum de Estudio de Segu-ridad Nacional 200 de 1974 y la necesidad de
implementar el aborto y la esterilización en las naciones subdesarrolladas como
normas regulares en aquellos estados a fin de despoblar el globo.
Ustedes, pajes del arcoíris de minorías
autoritarias y excluyentes, cumplen a rajatabla los designios del Evento 201,
del CDC y de la Farmafia (que financia campañas electorales en todo occidente y
es socia necesaria del narcotráfico a nivel internacional y de las agencias de
segu-ridad federales que lo administran), de los negociados de Bill Gates,
Anthony Fauci y de Tedros Ghebreyesus, y del conjunto de sabios brujos, en
blancos y almidonados guardapolvos, que desde el Oráculo de Delfos nos
prescriben sus contradicciones en su intento por explicarnos el castigo divino
que la Pachamama (Laudatio Si) nos ha propinado y que, a vuestro parecer el único
remedio y único intento por calmar la furia de Aruru es ofrecernos en
sacrificio y trans-formar el planeta en una inmensa prisión, jurídicamente
dictatorial, a fin de impelernos a some-ter nuestros cuerpos y los de nuestras
familias a una terapia experimental
eterna. Todo esto mientras la patria es sumida en un inmenso quebranto
económico, social, cultural y espiritual de escaso margen de recuperación.
Ustedes son la política internacional de
Kissinger y Brezezinski; rinden culto y examen frente al Consejo de las Américas, al Departamento de Estado Norteamericano,
al CFR, con un maga-zine del The Economist (periódico de la casa Rotchild)
sobre la mencionada mesa examinado-ra.
Ustedes, hijos del portador de la luz en
nuestra tierra, son junto a sus aliados globales: el Plan Austral y la economía
de guerra; la hiperinflación y el uno a uno; el Plan Brady y el Mega-canje; el
Blindaje Económico y las buenas noticias; la estatización de la deuda privada y
la enajenación del petróleo patagónico; la venta de YPF y su falsa
estatización; la entrega de la Hidrovía (desconociendo y deshonrando la batalla
de la Vuelta de Obligado) por donde se de-sangra y se corrompe gran parte de la
economía argentina y, además, obra como cabecera de playa al narcotráfico
internacional que ha transformado a la provincia de Santa Fe en puerto franco,
sin control estatal y recortada del territorio nacional con conocimiento y
complicidad de toda la claque política argentina.
Ustedes, patriotas de los intereses
foráneos, son Armando Gostanián en la Casa de la Mone-da; José Luis Manzano y
el robo para la corona; Oyarbide en Spartacus; la persiana a media asta en la
ventana del Ministerio de Economía durante la hiperinflación; Amira y sus
valijas; Al Kassar y Emir Yoma; los pollos de Mazzorin y las papas polacas
radioactivas; la voladura del arsenal y del pueblo de Río Tercero en el
contrabando de armas; el contrabando de oro y la pista de Anillaco para la droga;
el corralito y el corralón; las manzaneras y los gastos reserva-dos; los
barrabravas y la suelta masiva de presos en pandemia; la destrucción de la educación
de calidad en Argentina; el Congreso Pedagógico Nacional del ’84; Jorge A.
Rodríguez y la ley de Educación Federal 24195 del año ’93; Susana Decive (la
montonera menemista, socióloga y marxista) y los mil tres días de la Carpa
Blanca; Graciela Gianettasio/Duhalde (bajo instrucción del BID) y la
introducción de la Educación General Básica y el Polimodal en provincia de Bue-nos
Aires junto al cierre de las escuelas técnicas; la ley de Educación Nacional
20206 del año 2006 junto a la ley provincial bonaerense 13688 del año 2007 con
la introducción de los módu-los de seis años, todas ellas fosa y epitafio de la
enseñanza nacional y provincial.
Ustedes,
sepultureros de la clase media argentina (media hipócrita y media apolítica);
en cuatro décadas no han logrado siquiera que con la democracia se estudie, se
cure y se coma (objetivos ramplones, si los hay). Administran un país
privilegiado con capacidad de alimentar a cuatrocientos millones de personas y
no pueden ni quieren garantir el alimento básico y ne-cesario para los
veinticinco millones de compatriotas que ustedes han sumido en la más escan-dalosa
miseria.
Ustedes, amantes de Judas Iscariote
Nacional, son el decálogo menemista de Roberto Dro-mi; Somisa; los Altos Hornos
de Zapla; María Julia Alsogaray con tapado de piel y en cueros; el cierre de la
Cantábrica y de las grandes industrias textiles nacionales; ramal que para,
ramal que cierra como política ferroviaria nacional; la desaparición de los
astilleros y de la Marina Mercante Argentina.
Ustedes, propiciadores del dejar hacer,
dejar pasar de la corrupción privada y estatal, o-bran de tal modo que las
metas que les son impuestas sean inversamente proporcionales a las
posibilidades del fénix argentino, son el 21% del IVA de Cavallo y su ley de
Garantías de Depó-sitos Bancarios 24485 del ’95; son el canje compulsivo de
depósitos bancarios del ’89, Plan Bonex (confiscación impuesta por Erman González);
la masacre de Avellaneda y la de Once; los chicos asesinados en Cromañon; los
atentados a la embajada y a la AMIA; el juez Galeano y los vergonzantes encubrimientos;
el fiscal Nisman; el periodista Pachter y el entramado de la CIA, el Mossad, la
SIDE, la Federal y la Bonaerense; la política global de comprometernos en el
con-flicto de medio oriente y el envío de las fragatas al Golfo Pérsico; la
mejor policía del mundo de Duhalde y Ramallo; el Círculo Rojo y el Capitalismo
de Amigos; la gobernadora Vidal y las es-cuelas explosivas; René Favaloro y la
coima que no quiso pagarle a Larreta; las inundaciones de La Plata, los más de
cien muertos, el intendente Bruera y el gobernador Scioli; el copamien-to a la
Tablada, el MTP, Gorriarán Merlo y Alfredo Leuco; las privatizaciones de las
empresas de servicios, metalúrgicas y energéticas de los ’90 y la venta de
Joyas de la Abuela; los aho-gados en CABA en 2013 y el no se inunda más; la
pobreza cero de Macri y el 60% de niños bajo su línea; el empoderamiento de las
minorías y la autocensura; la libertad de expresión, el INADI y el NODIO, el
desapego a nuestras tradiciones y el multiculturalismo, el indigenismo radical
y la segmentación del territorio nacional propiciado por Inglaterra.
Ustedes, recua de hipócritas y embusteros,
son la casa está en orden y el desmantelamiento militar argentino; son las manzaneras
y los gastos reservados; los barrabravas y la liberación de presos a fin de
mantenernos en casa; son el envío de once toneladas de oro al Banco de Londres
durante el macrismo y el nulo reclamo del mismo en la gestión gubernamental del
Frente de Todos; son Chevrón y Vaca Muerta; las bases chinas y las
norteamericanas; son la ampliación de los planes sociales al infinito; son las
Lebacs y las Leliqs; son el Ministerio de la Menstruación y las jubilaciones de
hambre; el Ministerio de la Mujer y los salarios obreros mise-rables; son el
quebranto de las pymes y de los comercios; son los ciento sesenta y seis impues-tos
que ahogan el desarrollo argentino; la creación del monotributo; los contratos
basura y el trabajo esclavo. Son el incremento vergonzante de sus sueldos y,
aun así, la imposibilidad de justificar sus patrimonios.
Ustedes, mesías del odio y la destrucción,
son el Tratado de Paz y Amistad del ’84 y las islas Picton, Lenox y Nueva; son
el Tratado de Madrid del ’90 donde Menem y Cavallo sepultaron la soberanía
nacional.
Ustedes, adalides de la inclusión
excluyente, promueven la ignorancia y el rechazo al sen-tido ético, estético,
moral y trascendente de la vida.
Ustedes, apóstatas paganos aliados del
usurpador de la Cátedra Petrina, impulsan el trans-género y la muerte al no
nato, la transhumanización y la hibridación infecunda.
Ustedes, estafadores del pasado y del
presente, son la desmalvinización de la sociedad ar-gentina y los ositos Teddy
del canciller Guido Di Tella; la extranjerización de nuestras tierras (Benetton
y Joe Lewis): el agua de deshielo y el arsénico; el glifosato de
Monsanto/Bayer; Feli-pe Solá, las malformaciones y el cáncer.
Ustedes, asesinos despiadados pero amantes
de mascotas, son el estado de sitio de De la Rúa y sus treinta y seis muertos;
Duhalde y Kosteki y Santillán; Vidal y los maestros de Moreno, Macri y
Ironmountain y el ARA San Juan: Alberto y Cristina con los gobernadores
polichinelas y Facundo Astudillo, Lucas Nahuel Verón, Luis Espinoza, Florencia
Magalí y otros ochenta y ocho asesinatos producidos por las fuerzas de
seguridad nacionales y provinciales en ocasión de cuarentena inconstitucional
sostenida por DNU y la necesaria complicidad del Poder Legisla-tivo y Judicial
de la Nación (con todos los socios miembros que en dichos poderes operan).
Ustedes, adoradores del globalismo, de la
dictadura amarilla y de la monarquía angloameri- cana, son impulsores de la
leyenda negra española, son cómplices de las guerras bacterioló- gicas y
psicológicas de última generación.
Ustedes son los cincuenta y siete mil
millones de dólares de endeudamiento en un trimestre; la deuda a cien años; la
Banca Morgan y Templeton; la fuga de capitales y el gobierno de Ceos; la
imposición del miedo irracional y la corrupción gubernamental; el Olivos gate y
el Vacuna-torio VIP, la institucionalización del garche como política de
estado, la emisión monetaria sin fin y la entrega de título de deuda con
garantía en los fondos del ANSES y, sin duda, una nueva cuarentena por DNU para
intentar contener o reprimir los desbordes sociales que sucederán después del
próximo acuerdo con el FMI.
Ustedes, gente de patitas cortas, son la
sepultura del glorioso crucero de guerra ARA Santí-sima Trinidad que se pudre
para vergüenza de todos los argentinos bien nacidos y que fue en-viado a
desguace por el decreto presidencial 1017/2020, son la tumba del Proyecto
Misilístico Condor, de la política soberana de Energía Nuclear.
Ustedes, sofistas de la ponzoña, son
predecibles. Luego de la legalización del aborto preten-derán la legalización
de la droga; hacer de la Nación Argentina un Estado Plurinacional, au-mentarán
el control social a través de nuevas pandemias, la invasión de la intimidad y
el control tecnocrático, impulsarán la ley de Eutanasia, buscarán sancionar una
nueva Reforma Jubila-toria precarizante, irán por la ultra flexibilización
laboral.
Ustedes, viciosos de la traición, están
prontos a crear un Certificado de Vacunación que será sobretodo un Certificado
de Buena Conducta, les permitirá cumplir el objetivo que les han trazado,
descubrir y castigar a los disidentes.
Ustedes, traidores del proyecto patrio,
van por la dictadura digital y la desaparición de la moneda papel, regularán
nuestras vidas a través de un código QR.
Ustedes, casta traidora, perversa y
ladina, son la Agenda 2030, la privatización del mundo y un Nuevo Orden Mundial
a favor de los viejos mercaderes errantes que los sustentan.
Ustedes se creen inteligentes, pero los
vemos venir. Ustedes se equivocan, no triunfarán. Ustedes saben que los
argentinos sangramos. Nosotros, los
argentinos, sabemos que ustedes también.
LA ARGENTINA
PROFUNDA
La crisis de representación que existe en
los barrios despertó la ira de muchos que tratan de ingratos a los que menos tienen.
Esta irracionalidad de creer que los pobres te deben algo, ya sea simpatía
política, el voto o lo que fuera, ha mostrado las hilachas de quienes creen que
el pobre es sólo estómago o sólo bolsillo: no conciben que un pobre no los
banque ideológica- mente.
El centro de la política peronista hace
rato se viene corriendo hacia la izquierda, en especial desde lo
moral/ideológico, mientras que permanece estancado en lo económico. Quienes de-fiendan
el ATP deben saber: no llegaron los ATP a los barrios pobres, donde todos
sabemos que se comercia desde la informalidad. El IFE duró tres meses y la
pandemia un año y medio. Los planes sociales y algunos beneficios solo llegan a
la población más politizada y los pobres anti planes (incluyendo algunos que
los cobran) son cada vez más. La inflación es apabullante, el billete de más
alta denominación no llega a llenar una bolsa de mercadería. Hace rato que ya
no hay una época del mes que no se viva como fin de mes.
No podemos ser tan infantiles de echarle
toda la culpa al voto bronca porque las cosas nun-ca suelen ser tan simples por
estos pagos. Suele verse que el político hable con el corazón y el laburante le
responda con el bolsillo, ahora pasó que ni siquiera sintió que le hablaran a
él. ¿A cuántos incluís cada vez que decís todes y a cuántos dejas afuera? Si no
se habla el mismo idioma, difícil que surja una identificación. El precio de
sentirse inclusivo se paga caro: dejas afuera a muchos que todavía no
resolvieron demasiados quilombos como para seguirte el tren. No les terminó de
cerrar el feminismo y ya les estaban corriendo con la movida no binarie.
Aclaremos algo: la mayoría de la gente no
está en contra de estas causas. Tampoco están a favor. Simplemente son causas
ajenas, amorfas, extranjeras. La mayoría no las abraza simple-mente porque no
les generan ni fu ni fa. En todo caso está claro (para los politizados) que no
son causas en detrimento de la justicia social, pero que son percibidas como
grandes distrac- ciones: ¿Qué estaban haciendo mientras les quedaba debiendo al
almacenero porque la yerba se fue a $ 500?
Y acá entra algo incómodo para muchos pero
que es necesario decir: las grandes mayorías no tienen agendas ideológicas. Las
grandes mayorías no quieren que les rompas las pelotas, y tampoco te las
quieren romper a vos. Cada vez que les cancelas un artista que les encanta o
los haces sentir una porquería por reírse de algún cuento viejo, piensan más
que nosotros y ellos no tenemos nada que ver. Si ni siquiera nos reímos de
lo mismo, si no me dejas reírme a mí, si me retas como a un nene cuando digo
algo incorrecto ¿en serio esperas que me identi-fique con vos?
Hace rato que venimos diciendo: guarda que
la mayoría no se prende en la movida progre-sista, guarda que las mayorías
tienen otros problemas y otros valores. Una población que viene empobreciéndose
hace años en picada, enojada por la falta de escuela, destruida por las res-tricciones
de la pandemia viendo cómo las políticas siempre parecen tocarle a gente
especial o minoritaria. ¿Y yo, que soy común, para cuándo?
Esta corrida hacia la izquierda moralista (que
hoy no hace autocrítica sino que nos trata de odiadores seriales de minorías)
es cada vez más notoria y genera un quiebre de represen-tación. ¿Es culpa de
las minorías postergadas? ¿Hay que seguir postergándolas hasta el infi-nito?
Claro que no. Mientras se reivindicaron los derechos de estas personas, cayó el
poder adquisitivo de todos, minorías y mayorías por igual, por lo que queda a la
vista que una no agenda fue en detrimento de la otra. Podría haberse llevado
otra agenda, más popular y prag-mática en paralelo, pero no se hizo y, aun así:
cuidado, porque a nadie le gusta que le impon-gan lo que tiene que pensar.
Tus
problemas siempre son más importantes que los míos es una frase que
escuchan mu-chas parejas antes de separarse. El peronismo es ese partido que
alguna vez le hizo sentir a los pobres, a los trabajadores, a los excluidos,
que sus problemas importaban, que ellos eran ahora el sujeto político, la
agenda y el horizonte. Hoy tenemos trabajadores sin trabajo y con
representantes que hablan a públicos más ideológicos que terrenales. Yo no pido
que salgan de las redes, pero salgan de twitter y péguense una vuelta por algún
grupo de compra y venta de Facebook, que lo que van a ver es mortal.
Es
esperable que las mayorías sin otra causa más que la de poder vivir tranquilo,
tener un mango y que no le peguen un tiro para sacarle el celular; encuentre
quien los represente sin pedirle un certificado de corrección política. El
electorado casi siempre va a encontrar quien lo escuche, quien lo identifique
y, sobre todo, quien no lo rete.
Y claro, no todo son las grandes
cuestiones morales de la vida. Mientras las mayorías sin grandes causas tenían
reclamos concretamente materiales, se apostó cada vez más por lo simbólico.
Pueden no caer mal las ampliaciones de derechos, pero no se olviden de Cabezas.
Mientras que algunos no vieron venir que los sectores pobres tienen ideología
propia, otros creyeron que iban a bancar la crisis con más fidelidad de la que
se vio el domingo, y no son pocos los que creen que lo que hubo fueron
problemas de comunicación.
Por otra parte, la relación con el estado
se volvió más notoria que nunca. ¿Mira igual el día a día el que sabe que va a
cobrar todos los meses que el que vive apretando los dientes? ¿Cómo cayó que se
levante el IFE en plena pandemia? Llamo a un juzgado y no hay nadie, pero a la
noche me cruzo a la mina en un bar: el no retorno al laburo público de los que
ya habían reto-mado la vida privada se vivió como una enrostrada violenta.
¿Hasta cuándo el estado va a estar de cuarentena mientras yo tengo que lidiar
con la vida a medias? Las decisiones aleatorias de qué cosas sí, qué cosas no,
y ahora tengo que bajarme una app cuando este celu es una ca-gada y tengo que
borrar otra para tener espacio.
El desencanto quedó en evidencia. En
campaña me dijiste que me ibas a solucionar los pro-blemas, pero desde que
asumiste me decís que quieres evitar el conflicto. Los discursos son inclusivos
mientras el precio de la comida es excluyente. La comunicación del ticket del
chino nunca me miente.
Hablar de plata hoy es el verdadero tabú.
Nuestro problema es de producción, no de distri-bución. La brecha que existe
entre la población con una educación cada vez más exigua (y en el último año y
medio, nula) y la demanda laboral (cada vez más chica y exigente) deja en offsi-de
a millones de personas de todas las edades. Sólo nos queda concluir: o
adaptamos el siste-ma para que pueda entrar la gente o adaptamos a la gente
para que pueda entrar al sistema?. No me prometas un ideal de un mundo más
justo mientras el de hoy me exige idiomas, buena presencia y tres años de
experiencia. ¿Lo peor? En ciudades con problemas de desempleo estructural, aun
con todo eso no encuentras laburo hace años.
La solución al problema económico no se
reduce a poner plata en el bolsillo de la gente: ya lo dije atrás, aquellos que
tienen problemas económicos, también tienen ideología (y esto a muchos los dejó
shockeados). Aún en esos barrios donde el mango escasea que da calambre, los
planes no sólo no son siempre bienvenidos: cada vez causan más rechazo. Si
alguien que cobra planes gana casi lo mismo que yo, yo me convierto en un gil
laburante, mientras el otro es un piola bárbaro. Pero más allá de esa máxima,
detrás de lo ideológico, está lo real: los salarios paupérrimos han logrado que
trabajar sea inviable para los más pobres. Parece una joda, pero trabajar, aparte
de imposible, se volvió caro. Los costos de traslado, la comida fuera de casa,
conseguir quien cuide el nene (y encontrar quien cuide la casa ¿saben lo que es
dejar la casa sola en este momento?), esperar el colectivo y exponerse a la
inseguridad, esperarlo y que no pase, comerse los garrones propios de la vida
laboral, etc, etc. Aun los que siguen peleándola desde la búsqueda porque no
toleran otra forma de ganarse el mango, no encuentran un empleo que valga la
pena. Sobran currículums que ya ni hay a dónde tirar (por-que ahora las
empresas lo piden por internet).
Lo que
muchos repiten como mantra: Hay que
convertir los planes en trabajo, nadie explica cómo lo va a hacer. Lo que
sí sabemos es que en esas múltiples capas de desempleados, los hay de todas
formas y colores: los emprendedores incansables, los que se inventaron un
perfil en Instagram para vender, los que caranchean en los grupos de compra
venta, los changa-rines, los que nunca agarraron internet y siguen en el
mercado de la basura y la chatarra, los que duran dos o tres meses porque más
no se aguanta (por tan poca guita no hay quien aguan-te), los rappi, los
remiseros truchos, los UBER, los que cuidan hijos de otros laburantes que
licúan el sueldo, los que hacen de todo, los que harían lo que sea pero no
saben hacer nada, los que buscan y no encuentran hace años, los que nunca
pudieron entrar aunque se formaron porque simplemente hay ciudades donde hace
años sobra gente. Buscas, buscas y más bus-cas. Amarguísimo el sabor del
desencuentro.
También están, claro, los que nunca
trabajaron ni buscaron trabajo: ese sujeto que, nacido en la marginalidad,
formó su flaco colchón en base a lo que el estado le diera. Gente que no quiere
laburar hay en todas las clases sociales, pero es en la pobreza donde el estado
parece contener sin reparar, generando un desasosiego social. ¿Cuándo le llega
el título de egresado al que necesitó un plan? Creo que si hay derecho a
recibir cuando uno necesita, también debe haber derecho a dejar de ser un
eterno necesitado. En esa brecha de productividad donde algunos parecen no
tener nada para ofrecer en el mercado, hay incluso algunas fracturas: ponte una
mano en el corazón y acepta que algunos ya no van a poder entrar, a menos que
esta vez la política y el mercado piensen en algo distinto.
La franja etaria o la sorpresa de que los
jóvenes (que hasta hace un par de años, según el progresismo la tienen re
clara, nos enseñan a nosotros) no apoyen masivamente al oficialismo también
parece sorprenderlos. Si la progresía se vuelve norma es natural que la
resistencia sea conservadora, pero además ¿pensaste qué quiere un pibe de
veinte años? Quiere muchas cosas, pero ante todo descular como ganar plata para
lograr esas cosas. Al mundo lo mueven los sueños, pero a esos sueños les faltan
financistas.
Los siempre dejados de lado, los mayores
de cuarenta y pico sin laburo, muy jóvenes para ser viejos, muy viejos para
encontrar laburo, muy comunes como para figurar en alguna agen-da, siempre
quedan afuera de todo. La certeza de que tu problema no le importa a nadie es
un trago amargo: al menos a los jóvenes les hablan, a vos nadie te saca charla
en esta fiesta.
A modo de resistencia, en lugar de salir a
tildar a toda la población de facho (y de muchas cosas más) yo me fijaría un
poquito más en otras cosas. No sólo por el hecho de que llamarle facho a
cualquier cosa vacía el sentido político de la palabra, sino porque el gobierno
tuvo cla-rísimos errores y desfases con la realidad. También prestaría atención
a qué le llaman dere-cha. Si se te volvió de derecha hablar de criminalidad: fíjate
que a quienes más afecta es a los pobres. Si se te volvió de derecha hablar de
cargas impositivas, fíjate que a quienes más afecta es a quienes podrían ser
tus socios sacando a la gente de la pobreza. Si se te volvió de derecha que
alguien no hable con la e, fíjate que puedes ser medio fantasma.
La criminalidad ha aumentado poco en
comparación a lo que ha aumentado la pobreza, pero está cada vez más filosa en
los barrios pobres. El delito desorganizado, el robo al boleo, el ras-trerito,
aparecieron en la escena y las estadísticas oficiales lo confirman: la policía
agarra cada vez más pibes sin antecedentes.
Hace rato venimos pidiendo que la política
deje de ser indulgente con la delincuencia. ¿Pedi-mos mano dura? No. No todos.
Pero si me roban, preferiría que el estado esté de mi lado. La criminalidad
afecta a los más pobres, porque quienes tienen recursos pueden pagar elementos
de seguridad y prevención. Por el otro lado, quienes roban, son marginales con
cada vez me-nos recursos intelectuales, gente que solo puede robarle a alguien
igual de pobre que ellos. A largo plazo nadie discute que una sociedad más
justa y más igualitaria traería menos delito. Pero la gente no pide tanto, se
sentiría mejor si por lo menos le alumbraras la parada del bondi.
Quienes
exigen respuestas y soluciones, suelen ser hombres y mujeres de clase
trabajadora, laburantes de a pie y comerciantes para los que el robo y el
delito tienen un peso moral impor-tantísimo, además de sentir miedo de que en
cualquier momento les pase algo a ellos o a sus seres queridos. La militancia,
lejos de escuchar e intentar comprender la furia, los tilda de fa-chos.
En segundo lugar, minimizar el robo,
alegando que es un delito menor, es un error gravísimo. Por supuesto, ante el
organigrama penal, el robo seguramente será un delito menor. Pero para un
laburante que se compra un celular en setenta y ocho cuotas y se lo roban a la
segunda (y tiene que seguir pagándolo sabiendo que ese pibe lo vendió por dos
mangos) el robo tiene un peso transcendental. Que te roben el fruto de tu
esfuerzo (y peor, si sos de barrio sabes quién te robó, a quién se lo vendió y
a cuánto) es mucho más doloroso que cuando te roban y tu po-der adquisitivo es
otro. De ahí que se condena al robo en los sectores laburantes mucho más que en
cualquier otro lugar.
Otro error es el de colocar en situación
de víctima al delincuente. No estamos negando acá las condiciones de
marginalidad (me he cansado de explicar y explayarme en sus diferencias con la
pobreza) sino exponiendo la ofensa que es para millones de argentinos víctimas
de la pobreza que el delincuente sea más comprendido que la víctima de robo. Es
absurdo tener que decir lo obvio: la abrumadora mayoría de los que nacieron en
la pobreza jamás le asoman la cara al delito sin importar lo mal que lo hayan
pasado. Desconocer que es en la miseria donde más se afirman (y se ponen a
prueba) los valores, es desconocer la realidad por completo.
Por último, déjenme que apunte algo más
delicado. La baja de la talla en los delincuentes, cada vez más flacos, más
petisos, más aniñados, ha generado que mucha gente se resista a los robos y se
resuelva todo en un mano a mano. La violencia contra la violencia se vuelve ley
ahí donde no llegan patrulleros porque no hay móviles disponibles. Atención ahí
porque la alerta es doble.
Hace diez días hablé con un querido amigo.
Le dije que iban a perder en barrios pobres, que la gente estaba muy enojada
porque no hubo clases y ahora los hijos no quieren volver. Me dijo que
empataban o ganaban por dos puntos. Por suerte, no me corrió con lo que te corre
la mili-tancia sorda: clases siempre hubo.
¿Para quién? Para los que pudieron adaptarse al cambio, para los que tenían más
de un celular por familia, para los que tienen wi-fi. Habrá muchos niños héroes
que se las arreglaron para seguir sin nada de eso, pero la educación es un
derecho, no una actividad para niños extraordinarios.
Hay quienes temen hablar del sistema
educativo. Creen que hablar de su pésimo estado, es atacar a los docentes.
Lejos estoy de esa postura. Si queremos una educación que nivele para arriba,
que los niños desarrollen habilidades y competencias que los vuelvan capaces,
debe-mos pelear a muerte por mejorar drásticamente la escuela pública, que ha
perdido hasta su le-gitimidad. La cuarentena era, por ejemplo, un gran momento para
arreglar todas las escuelas. No ocurrió. El estado de las escuelas públicas es
innegable. El ausentismo del alumnado es tan preocupante como el docente. El
pésimo estado hace que las clases medias (e incluso las me-dias bajas, que se
pelan el cuero para pagar) emigren a la privada. Más pobres en escuelas po-bres
es igual a menos convivencia sociocultural, lo que resulta indirectamente en
menos movi-lidad económica ascendente.
Hay trompadas que duelen, pero te acomodan
las ideas. La salida no es por izquierda ni con más planes. Por favor. Tampoco
apelar a la solidaridad de nadie, que el país no es una ONG. Para que los
empresarios puedan habilitar más puestos de laburo hay que apelar a sus ambi-ciones,
no a su sentido moral o patriótico. Hay quienes me van a correr con que los que
gene-ran laburo no son los empresarios: buena suerte con esos lemas. El nuestro
es un país capi-talista y mientras no me hagas la revolución te pido que me
consigas buenos convenios.
Lo peor que le podría pasar al país sería
el retorno del macrismo, ahora liderado y encar-nado en Larreta. No se le puede
pedir a la gente un apoyo ciego si económicamente vive peor e ideológicamente
escucha un discurso más propio en ellos que en nosotros. A la crisis económi-ca
se le responde con acciones y a la crisis de identidad política se le responde
con los brazos abiertos: basta de echar gente porque no coincide en alguna
cuestión irrelevante. ¿A dónde se vio que el peronismo excluya a los que no se
van aggiornando a la época?
Estos son mis apuntes en base a la
observación y también mis deseos. Que la política en general y el peronismo en
particular vuelva a llenar de contenido los discursos vaciados. Que se hable y
se labure por lo que la gente quiere: que la plata le alcance, que no le
afanen, y en lo posible, que los que están para asegurar todo eso no le rompan
las pelotas.
LA
DESAPARICION DE MARCELA LOPEZ – Opi Santa
Cruz
Uno de los casos más resonantes del año,
en Río Gallegos, hasta el momento no tiene desen-lace. Se trata de la
desaparición de una conocida vecina que, desde hace más de tres meses, falta en
su casa. Se trata de Marcela López Frey, la mujer de 61 años que fue vista por
última vez el pasado 22 de mayo. Una nieta de ella fue la última en verla en la
zona de la costanera, lugar donde el día después encontraron sus zapatillas y
su campera prolijamente acomodadas en el muelle de YCRT. Las circunstancias de
la desaparición son, al menos, raras. Marcela dejó las luces de su casa
prendidas. Su teléfono con su billetera (que contenía una suma cercana a los $ 20.000
mil) fueron encontrados en el interior de su auto que estaba abierto.
Para la jueza, la hipótesis más firme es
que la mujer se habría suicidado arrojándose a las frías aguas del estuario y
los rastrillajes se han focalizado en esa zona. El superintendente de Bomberos,
comisario Martín Aguirre indicó: En 28
años de servicio, es la primera vez que no aparece el cuerpo de una persona que
se tiró a la ría.
Los familiares sospechan que fue secuestrada
y asesinada. Lo interesante de este caso es el vínculo con Máximo y Florencia
Kirchner. En el mes de julio la familia de la desaparecida deci-dio a un
adiestrador de perros rastreadores de personas. Los perros persiguieron el
rastro de la mujer hasta una curiosa casa de madera, la cual está ubicada en un
terreno que tiene como propietario a José Luis Balado; que da la casualidad es
ex pareja de la desaparecida; ya tam-bién, curiosamente da la casualidad que el
sobrino de José Luis Balado es administrador de las propiedades de Máximo y
Florencia Kirchner.
Lo impresionante es que dentro de la casa
los perros encontraron huesos humanos. Pero, esto aunque ya de por si da miedo;
los perros también hallaron cajas y mas cajas de dólares termo sellados, valuados
en u$s 75.000.000 en una casa que, da la casualidad, es propiedad de los
Kirchner. Según los testigos, en este momento, José Luis Balado, se desmayó.
El
abogado Jorge Trevotich, querellante en la causa por la desaparición de Marcela
López, dijo lo siguiente: Hicimos una
presentación ante la jueza López Lestón pidiendo un allanamien- to, ordenó la
medida pero no hizo extensivo el allanamiento a la propiedad donde la noche
anterior encontramos las cajas con dólares y además, en ese momento, José Luis
Balado me recriminó que si no me iba de ahí me iba a cagar a trompadas,
resaltando el cambio de actitud entre ese día y la noche anterior cuando
encontraron esa fortuna guardada en cajas de oficina.
Posteriormente,
ante la posibilidad de que alguien sacara las cajas con dólares de allí, Tre-votich
junto con la hija y las nietas de Marcela López, contaron que instalaron una
vigilancia que dio resultado positivo. El abogado aseguró que esa noche, a pesar
de que en ese momento había restricción de circulación hasta las 18.00, tres
personas que se movían en un Chevrolet Corsa gris, alrededor de las 20.00,
comenzaron a retirar las cajas de la casa.
Trevotich detalló que existe un video que
la querella ha pedido anexar a una causa denun-ciada en el Juzgado Federal de
Río Gallegos. La teoría del abogado Trevotich, es que la desa-parición de
Marcela López está íntimamente relacionada con el hallazgo de estas cajas con
dinero, que podría ser procedente de actividades ilegales.
Recordemos que la jueza federal durante muchos años y que hoy ocupa un
cargo en el Tri-bunal Superior de Justicia de la provincia es la Dra. Alícia de
los Angeles Mercau; hija de la gobernadora Alicia Kirchner.
OTRO
SUICIDADO EN VICENTIN – Página 12
Quién era Nicolás Nardelli, el miembro de
la familia dueña de Vicentin que encontraron muerto. El fallecido Nicolás
Nardelli tenía 37 años y era el hijo de Gustavo Nardelli, ex gerente de la
Terminal Puerto Rosario de la exportadora cerealera Vicentín. Sus conocidos lo
recuer-dan como un muchacho agradable, jovial e inteligente y la noticia de su
muerte causó estupor entre sus allegados.
Como nieto de uno de los fundadores de la
compañía, además de hijo y heredero de uno de los dueños, ocupó durante un
tiempo un sillón en el directorio de Terminal
Puerto Rosario y algunas otras empresas de la familia. De hecho, él fue uno de
los que se opuso al plan de inter-vención del gobierno nacional en la empresa,
y hasta mantuvo reuniones con representantes del Poder Ejecutivo para
desarticular la recuperación de la empresa por esa vía.
Esa iniciativa había sido impulsada por la
gestión de Alberto Fernández luego de que la firma auto implosionara tras la
serie de préstamos impagables otorgados por el Banco Nación, bajo la
presidencia de Mauricio Macri. El clan Nardelli había sido aportante para la
campaña que llevó al líder de Juntos por el Cambio a la Casa Rosada, en 2015.
Su cuerpo fue hallado en el Campo Timbó,
propiedad que los Nardelli habían adquirido y donde funcionaba una cancha de
golf. Si bien aún se investigan las causas del fallecimiento, sus allegados
niegan que tuviera un potencial perfil de suicida.
La familia Nardelli había sufrido
recientemente la pérdida de Sergio, tío de Nicolás y her-mano de Gustavo.
También habían perdido anteriormente a Esteban, hermano mellizo de Nicolás, en
un accidente. Sergio Nardelli fue CEO y uno de los principales accionistas de
Vicentín. En ese carácter, fue quien concurrió a Olivos, en compañía del
gobernador Omar Perotti, para entrevistarse con Alberto Fernández la misma
semana en que se había anunciado la
intervención de la empresa. El 12 de agosto de 2020 murió a los 59 años. Estaba
en su domicilio particular de la localidad santafesina de Reconquista cuando
sufrió un ataque car-díaco, según informó la familia.
EL TRABAJO
DEL FUTURO
Las balas ya pasan cerca. El retail sigue
dando pasos hacia el futuro. Carrefour ha lanzado recientemente el formato
Carrefour City+, un establecimiento automatizado, sin empleados, dotado de un
ecosistema de cámaras, sensores y tecnología de inteligencia artificial que per-mite
a los clientes adquirir los productos y salir de la tienda sin pasar por la
tradicional caja de pago. Este sistema ya ha sido implantado por gigantes como
Amazon en Estados Unidos, país en el que se están haciendo las primeras pruebas
para exportar más adelante el modelo de tienda a otros mercados.
Para mis amigos orientales; Uruguay
recibió propuesta formal de China para avanzar en la firma de un tratado de
libre comercio. Es el pacto del elefante con la hormiga, y no se enojen
conmigo. Cuando se firmó el pacto Roca-Runciman, un exaltado diputado del
parlamento ingles gritó: Hasta los
ponchos que usan los gauchos en las pampas van a ser fabricados en Man-chester.
Ahora les digo a ustedes que los termos, las bombillas y los mates serán
chinos.
A SEGUIR
ESTA NOTICIA
El desarrollador de bienes raíces más
grande e importante de China, EVERGRANDE (y su deuda de más de u$s 300 mil
millones), colapsó en el 13° aniversario de la declaración de quie-bra de
Lehman, cuando Beijing le dijo a los bancos acreedores de Evergrande: que la empresa era insolvente, que
recientemente contrató a Houlihan Lokey como asesor de quiebras, que no pagaría
intereses sobre su deuda la próxima semana, ni reembolsaría el dinero principal.
CONCLUSIONES
En todo este escándalo por el resultado de
las elecciones, hay algunos personajes que, ju-gando con la falta de memoria de
los argentinos, dan una clase de hipocresía. Una de ellas que en cuanto
micrófono le acercaran hablaban de la vergüenza de colocar al país al borde del
abismo por una discusión entre la pareja presidencial, es Patricia Bullrich. En
ninguna alocu-ción hizo mención que ella era funcionaria de De la Rúa cuando
renunció el vicepresidente Chacho Alvarez
el 6 de octubre de 2000, denunciando corrupción en
la administración
de De la Rúa y en el Senado nacional, escándalo conocido el de las coimas en el
Senado. Ella era Secre-taría de Política Criminal y Asuntos Penitenciarios del
Ministerio de Justicia y Derechos Huma-nos de la Nación; y tras la renuncia de
Alvarez ocupa el cargo de Ministra de Trabajo. Te pre-gunto Patricia; en ese
momento no se colocó al país al borde del abismo? De hecho, el desen-lace lo
tuvimos catorce meses después, en diciembre de 2001.
Otro que bate todos los records de
caradurismo e hipocresía es el señor feudal vitalicio Guildo Insfran, que acaba
de decir: Los porteños, que no saben lo
que es plantar una lechuga, quieren venir a indicarnos lo que tenemos que
hacer. Son zánganos que viven del esfuerzo y del trabajo de todo el pueblo
argentino. Vamos a ver quien vive del esfuerzo de todo el pueblo argentino;
Formosa es la provincia que tiene la mayor brecha entre ingresos generados y
per-cibidos. Recibe 465% mas de lo que aporta. La Ciudad de Buenos Aires tiene
la mayor brecha negativa 68,9% menos de lo que aporta. Por caraduras e
hipócritas así andamos como anda-mos. Ni siquiera tiene vergüenza porque no
puede justificar como mantiene el feudo; ya que ese dinero que recibe no se
nota en el nivel de vida de los formoseños.
Con el resultado de las últimas elecciones
no hay demasiadas alternativas; una es esperar una derrota aún mayor en
noviembre con lo que eso significaría para un kirchnerismo acorra-lado por las
denuncias penales. Otra es hacer explotar el país por el aire para balcanizar
la Argentina y escapar en medio del despelote. Esto último es lo que busca la
élite global.
Tengamos siempre presente esto; que la
élite global quiere una Argentina balcanizada y destruida y todos los caminos
llevan hacia allí. Cualquiera que gobierne, como nadie saca los pies del plato
y ofrece algo nuevo fuera del régimen no hay otro camino, mas tarde o mas
tem-prano. No tienen apuro porque todo está controlado, a los gobernantes, los
que se postulan y la rebeldía del pueblo; todo está bajo control. Somos muy
pocos los que vemos la luz al final del túnel y, además incomprendidos.
Observen donde nos han llevado; hagan una revisión de los políticos que se
presentaron a las elecciones; esta y la anterior, ya que de allí saldrán los
futu-ros gobernantes. No importa que orientación tengan, díganme dos o tres
capacitados para sa-car a nuestro país del pozo. No hay uno solo con garra y
que no ofrezca mas de lo mismo. Ese es
el mayor triunfo del enemigo; ha vaciado de contenido la dirigencia argentina.
El contrapeso a la decisión de la élite
global es que, como ya lo hicieron varias veces desde 1983; la clase política,
ante cualquier atisbo que haya un colapso institucional cierran filas con el
que gobierna, por una cuestión de auto defensa y para no quedarse sin los
ingresos y los pri-vilegios. Eso, lo único que logra es tener un poco mas de
tiempo para planificar algo. Hay algu-no, con recursos planificando? No, Sin
recursos, varios.
Otro contrapeso es el carácter de Cristina
que no permite que nadie le haga sombra; y a ve-ces eso va contra sus
intereses, porque arremete para adelante, instintivamente.
Yo grabo sábado a la tarde, algunas
noticias no las tengo para el lunes; pero con la designa- ción de Aníbal
Fernández en Seguridad se viene la represión en serio; el Nuevo Orden Mundial
acaba de tomar el poder. Ella responde a esos intereses; pero ellos la quieren?
Esto pasó en Australia, falta mucho para que acontezca aquí?
VIDEO AUSTRALIA
Cuando nos reunimos, salta la pregunta: en
medio de un gran desorden con violencia, tipo anarquía, los militares no van a
intervenir? Mi respuesta es siempre la misma; no ha cambiado en años: Primero,
tienen mas de 2000 presos en las mazmorras del régimen; eso ya los limita. Y
saben que los irrita?; que gobiernan los sobrevivientes de los ´70 que eran
igual o peores que ellos. Segundo, son los militares de la democracia y no
zafaron de la decadencia de la sociedad argentina. Tercero; y es la pregunta
que les hago siempre: Supongamos que ante hechos gra-vísimos y que ya le
cascoteen el rancho intervengan; a quien se lo van a entregar?; como han hecho
siempre, sin excepción; a los Pinedo,
Alzogaray, Aleman, Krieguer Vasena, Martínez de Hoz de turno. El sistema es muy
inteligente y fabrica los relevos; hoy se llama Javier Milei.