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CONTENIDOS
Entre los comentarios encontrarán el enlace
al programa sin censura subido a las platafor- mas alternativas; El grano del
sistema 674: 5G Asesinato a control remoto. Los textos los en-contrarán en
reconquistatv.blogspot.com y una vez allí Contenidos programas. Todos los vi-deos
de Youtube se suben automáticamente a Odysee; en los comentarios está el
enlace. También los encontrarán en el blog en Links videos. Todos los videos se
suben también al canal de Telegram El grano del sistema TV. Los que colaboran
con el programa solo pueden hacerlo por el Banco Provincia.
Les aviso a los que se comunican conmigo,
vía comentarios o correo electrónico; que esta semana voy a estar muy
complicado por trámites personales y estudios médicos de mi esposa. El tiempo
libre lo voy a usar para armar el próximo programa.
Agradezco a Facundo que me obsequió una
cámara; que si bien no la puedo utilizar para grabar los videos porque trabajo
solo, si me sirve para hacer reportajes o entrevistas; ya que en esos casos voy
acompañado.
LA MUTACION
DE LA ESPECIE
Cuando acontecen hechos conmocionantes
como el bombardeo al hospital de Gaza ocurre siempre lo mismo; los sectores en
conflicto se acusan mutuamente. Lo importante no es quien fue el culpable, sino
la percepción de la gente. La percepción se logra de dos maneras; por la
experiencia personal basada en hechos históricos asimilados en el tiempo y por
el mensaje de los medios. La primera responde al impulso, la segunda está
direccionada; ya que nunca la información deja de responder a una estrategia.
De lo que prime de los dos motivos vendrá
la reacción de la población. Si es preponderante la primera, al responder
impulsivamente se obnubila la razón, por lo tanto las reacciones sue-len ser
violentas. Y acá en donde entramos en una línea muy delgada en la que los
hechos pue-den ser provocados para generar determinadas reacciones. Y cuando
todos los protagonistas se mueven como pez en el agua dentro de un escenario
violento los dos motivos pueden con-fluir, ya que una buena campaña mediática
puede exacerbar mas los ánimos.
Eso parece ser el quid de la cuestión en
este hecho horroroso; generarlo en el momento que Europa está invadida no puede
ser casualidad. La invasión tiene dos aristas, la financiación y la provisión
de gente. No son los mismos, aunque el sector financiero soborna a todos los
gober-nantes para que hagan cumplir su agenda; la gente es arrastrada por los
medios.
Y acá está la gran jugada del régimen
cualquiera de los intervinientes, tanto directos como indirectos pueden ser
responsables. Esta cosa difusa es el triunfo del sistema; no se puede culpar a
nadie.
Para graficar, ustedes saben que siempre
voy a la historia, pasa observar como se manejan los medios del régimen.
Salvador Allende estaba infiltrado por centenares de espías cubanos. El
presidente se había quejado varias veces de esa injerencia externa. La clave
fue el primer intento de golpe militar, el 29 de junio. Cuando La Habana supo
que los chilenos que rodeaban al presidente estaban asustados; Castro hizo
saber que Allende no podía rendirse ni pedir asilo en ninguna embajada: Si él debe morir, debe hacerlo como un
héroe. Cualquier otra actitud co-barde o poco valiente, tendría repercusiones
graves para la lucha en América Latina.
Castro percibe que Allende no era el
hombre que necesitaba en Chile; empieza preparar el relevo a espaldas del
presidente; sus candidatos eran Miguel Henriquez y Pascual Allende, nú-meros
uno y dos del M.I.R. También pensó en la hija mayor, Beatriz Allende, que
pertenecía al movimiento. Al precipitarse los acontecimientos, Castro da la
orden a Patricio de la Guardia de eliminarlo si en algún momento cedía ante el
miedo.
Poco antes de los primeros ataques a La
Moneda, Allende le comentó a Patricio de la Guar-dia que había que pedir asilo
en la embajada de Suecia. Inclusive designó a su consejero de prensa, Augusto
Olivares para que lo solicite. Este le contaba todo a los cubanos. Poco antes
que las tropas ingresen al palacio Allende pedía cinco minutos de cese el fuego
para negociar la rendición. Patricio de la Guardia lo atrapa cuando quería
salir, sentándolo en el sillón presidencial al grito: Un presidente muere en su sitio. A continuación lo mata.
Patricio de la Guardia, era el agente de
Fidel Castro encargado directo de la seguridad del mandatario chileno. Esperó
que este regresara a su escritorio y le disparó sin mas una ráfaga de
ametralladora en la cabeza. Enseguida puso sobre su cuerpo un fusil para hacer
creer que este había sido ultimado por los atacantes y regresó corriendo al
primer piso del edificio en llamas donde lo esperaban los otros cubanos. El
grupo abandonó la Casa de la Moneda y se refugió en la embajada de Cuba que se
hallaba cerca del lugar.
Al día siguiente el diario Le Monde
publicó que según versiones del ejército lo había matado su guardia personal. Varias
agencias dijeron lo mismo; esa hipótesis fue enterrada inmediata-mente por los
medios, no le convenía a nadie. Esto le vino bien a todos, Pinochet zafa del
ase-sinato y la izquierda tiene un héroe. Así se mueven, lo quieran entender o
no.
Y es aquí donde está la madre del borrego;
los medios al servicio del régimen toman a la gente del hocico y lo llevan
hasta su propia autodestrucción. Y lo que es peor que se arrastra a gente cuya
percepción de la realidad piensa lo contrario; pero el miedo y el conformismo
lo llevan a aceptar los hechos. Ahora bien, como se vive con un apresuramiento
nunca visto, los hechos se dan casi de inmediato. En 2020 tuvimos una gran
muestra de lo que digo; nunca la sociedad va a regresar al 2019; es decir
estamos hablando de menos de cuatro años, todos lo hemos vivido. Y ese cambio
que hemos observado fue pura y exclusivamente producto de los medios. Y acá no
tiene nada que ver si la pandemia existió o fue provocada; los medios podían
haber transmitido mesura en lugar de terror, en cualquiera de los dos casos.
Se usó la pandemia como en otros momentos
se usaron otras cosas; es el sistema comuni-cacional que determina el destino
de una sociedad. Cuando hago hincapié en que pasaron menos de cuatro años es
que todos hemos percibido la presión de los medios. Hoy podemos evaluar la
pandemia y darnos cuenta que pudo ser tratada de otra forma, como un tema
exclu-sivamente sanitario; y no se hubiese destruido la economía, por ejemplo.
Si lo analizamos de esa forma evitaríamos caer en la trampa nuevamente; porque
el régimen cada vez que quiso efectuar cambios profundos en la forma de vida
acudió al miedo como el elemento principal.
Hace cuatro años fue una pandemia, hoy
puede ser el terrorismo y mañana una invasión extraterrestre. Cualquiera puede
evaluar si cada vez que el régimen operó sobre la sociedad el nivel de vida se
mantuvo o fuimos mas pobres. Es una evaluación primaria que nos tocó el
bolsillo; si no estamos capacitados para hacerla es que ya lograron la mutación
de la especie.
LA SITUACION
EN ORIENTE MEDIO - Semyon Bagdasarov - Centro de Estudios sobre Oriente Medio.
La situación en Oriente Medio se está
desarrollando dinámicamente y puede conducir a hostilidades a gran escala,
definiendo claramente las fuerzas del enemigo: el llamado eje de la resistencia
según Irán y sus aliados, o el eje del mal según Irán a Estados Unidos y sus
aliados. Se trata de Irán, Siria, en parte Irak, Hezbollah y Ansar Allah, por
un lado, y sus oponentes, Estados Unidos, Israel y Gran Bretaña.
Se pueden desarrollar las siguientes opciones.
La primera opción está bajo la presión de Estados Unidos y Gran Bretaña, que
han confirmado que el traslado de fuerzas militares al Mediterráneo oriental;
Irán, Hezbollah, Ansar Allah y los grupos armados (Siria, Irak) no inter-ferirán
en el conflicto, lo que resultará en una pérdida de autoridad en el mundo
musulmán, que, de hecho, borrará muchos de los éxitos de Irán.
La segunda opción es que tras el inicio
de la operación terrestre, Hezbollah, Ansar Allah y las formaciones chiítas de
Siria e Irak, con el apoyo indirecto de Irán, intervengan en el con-flicto y
comiencen hostilidades a gran escala (frontera con Líbano, Siria). Ansar Allah
(Yemen) lanza ataques con misiles y vehículos aéreos no tripulados contra
objetivos estratégicos israe-líes, todo ello acompañado de acciones activas de
Hamás. En este caso, Estados Unidos y Gran Bretaña utilizarán sus grupos en el
Mediterráneo oriental y comenzarán a atacar activa-mente a Siria, el Líbano e
Irak, provocando una tormenta de indignación y críticas en el mundo islámico,
que ya está en primera línea en la guerra. ataque, que sin duda afectará a la seguir-dad
de Estados Unidos y Gran Bretaña en el mundo musulmán, extendiéndose mucho más
allá de Oriente Medio.
Sin embargo, existe una tercera opción.
Entre bastidores llegarán a un acuerdo, pero como la situación empeora
constantemente, la esperanza de un compromiso ha desaparecido última-mente.
Israel parece estar planeando una
operación terrestre en la Franja de Gaza, donde sólo en el norte vive más de un
millón de personas. El conglomerado (Franja de Gaza) cuenta con una extensa red
de túneles, utilizados por Hamás, el grupo Jihad Islámico Palestino y varios
otros grupos, que les permitirán operar activamente en caso de una invasión. En
esta situación, Israel puede utilizar tecnología de aviación, artillería y
misiles para arrasar todo y sólo enton-ces enviar tropas, lo que sin duda
provocará enormes pérdidas entre la población civil, que, sin duda, encontrará
una reacción negativa. y críticas colosales no sólo en los países islámicos
sino en todo el mundo. En cualquier caso, esta operación se prolongará durante
mucho tiempo y provocará enormes pérdidas humanas, quizás incluso mayores que
las de la batalla de Mosul. La situación se está volviendo extremadamente
peligrosa y podría conducir a hostilidades a gran escala.
En caso de un ataque directo contra Irán,
Irán se verá obligado a responder. Quizás se trate de ataques tanto a la
presencia de Estados Unidos y Gran Bretaña en los países del Golfo como en
Oriente Medio en su conjunto, así como al territorio de Israel, así como a la
participación activa de formaciones pro chiítas en el Líbano, Siria, Irak y
Yemen, lo que conducirá a batallas aún más feroces.
Israel está evacuando sus embajadas en
varios países de Oriente Medio. Y el Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel
pidió a los empleados de veinte embajadas en Europa y América Latina que
permanecieran en sus hogares.
EPÍLOGO
DE LA HUMANIDAD - Lomas Cendón
La ilusión, esa dama demiurga que en India
llaman Maya, tiene su origen etimológico en la voz latina illuso, engaño, mofa,
timo, fraude, broma. Es la misma raíz de eludiren cuanto a disi-mular con
astucia; la misma que lúdico como algo relacionado al juego. Vivir ilusionado
signifi-ca vivir engañado, sin comunicación con la verdad, atrapado en la
burlesca evanescencia pro-yectada por unos sentidos que confunden y que fueron
concebidos para confundir.
En algún momento del siglo XIX, la palabra
ilusión en lengua española empezó a entenderse también en su acepción de
esperanza. En ese mismo siglo, Friedrich Nietzsche dejó por escrito que la esperanza es el peor de los males, pues
prolonga el tormento del hombre, lo que no deja de ser un plagio de un
versículo del Samkhya Karika, una obra clásica de pensamiento hindú. Ilusión o
esperanza como vana perpetuación del sufrimiento bajo la dudosa promesa de un
futuro clarificador. Algunos modernos lo llamarán pesimismo; otros, realismo.
Pero todos, y tú y yo con ellos, nos aferramos como una lapa a una ilusión de
continuidad del hoy para ver qué pasa mañana. ¿Ganas de vivir? No, curiosidad
malsana y que no nos queda otra.
Desplegamos nuestros lemas existenciales,
nuestras consignas de autoayuda, nuestros pensamientos positivos. La esperanza es lo último que se pierde,
escuchas en la iglesia; Crea tu propia
realidad, dice un youtuber; La
diferencia entre ganar y perder,
frecuentemente, es no rendirse, dijo Walt
Disney; Quien resiste, gana, reza el
epitafio de Camilo José Cela; Hasta la
victoria siempre, decía el Ché Guevara; No
te canses de luchar, se lee en un cartel de la sala de espera de oncología.
Y todas estas frases me suenan a artificio para evitar pronunciar la ver-dad,
tan verdad como devastadora, proporcionalmente absoluta e insoportable: la
existencia en este mundo es un calvario. No hay hombre ni Dios que la aguante.
Vivir es una tortura in crescendo y ni el clímax de la muerte nos libra de ir
sembrando dolores y pesares a nuestro paso, antes, durante y después de ella.
Lector, valora mi honestidad sin tener en
cuenta la brutalidad de lo que te voy a decir: vivimos en un mundo diseñado
como jaula para que subvivan reses cuyas miserias alimentan a ocultas criaturas
del averno. Se trata de una colonia penitenciaria sin escapatoria. No tenemos
plan de fuga. Nuestra ciencia es falsa. Nuestra historia, mentira. Nuestras
religiones confor-man diversos métodos de adiestramiento y explotación. Desde
2020 se ha entrado en un pro-ceso de perfeccionamiento del control en esta
granja que conlleva la aniquilación de tu libre albedrío, de tu esencia humana,
de tu dignidad. En muy poco tiempo, cualquier pensamiento discordante del
oficial será identificado y neutralizado. Si quieres zafarte de este sistema de
control, te harán la vida imposible.
Si buscas librarte de su represión, te
perseguirán. Si pretendes buscar vías alternativas, te arruinarán, te aislarán
y te harán pasar frío y hambre. Si estás seguro de que quieres oponerte a sus
planes, prepárate para la soledad, la calumnia, el ostracismo. Las relaciones
personales serán sustituidas por redes sociales. Nuestra creatividad será
despreciada; nuestro arte, vilipendiado; nuestras facultades humanas serán
usurpadas por una siniestra inteligencia arti-ficial fundida con nuestro
organismo. Abrazos y amistades sustituidos por emoticones y con-tactos de
WhatsApp; pornografía y artefactos sexuales como sucedáneos del amor y la
alegría erótica; teletrabajo en vez de cooperar con la naturaleza; videos de
YouTube en vez de libros; Big Data en vez de bibliotecas; ruido, convulsiones y
necios hits en vez de música; avatares en vez de personas; stories de pocos
segundos en vez de preguntarte cómo te encuentras.
La realidad dejará de ser real y pasará a
ser virtual. La verdad será relativa, simplona, minúscula, un engendro llamado
post verdad, un híbrido entre la opinión y un constructo so-cial. Burdos
embustes como el cambio climático, las ponzoñas, las guerras orquestadas, se
alzarán a la categoría de hechos a través del sufrimiento, la miseria y el
genocidio. Dudar será una falta; cuestionar será delito; pensar estará
tipificado como crimen. Justificarán lo injustifi-cable, se aceptará lo
inaceptable, y nos convencerán de que lo hicieron por nuestro bien. El bien
común. ¿Común a quién? Nadie entenderá lo que está pasando. Nadie sobrevivirá
sin adaptarse a estos nuevos parámetros inhumanos impuestos. Nadie dirá nada,
como nadie estará dispuesto a escuchar estas palabras.
Alguien dijo que los avestruces meten su
cabeza en tierra cuando se ven amenazados. Hasta hoy nos creímos esta chorrada,
y usamos a este animalejo como símbolo de no querer encarar cualquier peligro
para nuestra existencia. ¡Hasta en eso somos crédulos! El avestruz escapa, se
zafa, es un veloz corredor; si no puede huir, se defiende digno y agresivo, y
te sacará un ojo (o los dos) antes de que lo caces. ¡Ojalá fuerais avestruces!
Sois, eso sí, pollitas jóvenes, esta-buladas, sin sexar, aún con plumón,
incapaces de pensar más allá del corral en el que estamos confinados. Huevos
ponéis muy pocos y le echáis aún menos. Adoptasteis la estrategia de imitar a
la gallina más gorda y cacarear cuando algún compañero corría decapitado cerca
vuestro. Os dijeron que eráis soberanos de vuestro gallinero (democracia, lo
llamaron), y os definisteis como gallinácea de izquierdas o gallinácea de
derechas. ¡Tanto revuelo entre voso-tros para acabar como estamos acabando!
Te criaron para obedecer desde la escuela.
Te adiestraron para acatar lo que sea: las reli-giones, los derechos humanos,
el sistema solar, el IVA, el holocausto, el alunizaje, el origen del sida, el
calentamiento global, las alarmas de protección civil. Te cebaron de orgullo
con títulos universitarios, másteres, doctorados, y te inculcaron no cuestionar
como camino a la felicidad. ¡Y el método funciona! Repites lo que te han dicho
que repitas; callas cínico cuando se te de-lata; te ríes de aquellos con los
redaños que te faltan; y, mientras no seas tú, si agarran a otro pollo por el
cuello, miras a otra parte, enseñas tu cloaca, y a otra cosa, mariposón.
Chiquito de la Calzada siempre tuvo razón:
¡Cobarde! Te dicen que eliges a tus gobernantes a través de un sistema de
representación fraudulento y corrupto hasta el tuétano, y tú partici-pas en él,
votando cada cuatro años al mequetrefe que te cae como presidente. Finges más
de cuarenta horas semanales que estás aportando algo bueno a la sociedad, y te
dan tu azucarillo mensual, para que lo consumas con los productos que tú mismo
produces o lo guardes en su mismo cártel bancario criminal de donde salió el
dinero. Compras la ropa de payaso que te dicen que te compres (vas a la moda);
ves la tele; te informas; opinas sobre los temas de mierda que te van dictando
(el fútbol, el terrorismo, el reality de turno, la economía, eurovisión, los
descubrimientos de la NASA, el encierro de San Fermín, la vida sexual de una
famosa, el euribor, o las polémicas declaraciones de no se quién; lo que toque.
¿Y qué toca ahora? Te toca escuchar lo que no quieres oír:
Te engañan y te dejas engañar. Asesinaron
cobardemente a tus mayores en las residencias y no hiciste nada salvo
aplaudirles a las ocho. Te encerraron en tu casa ilegalmente y no hiciste nada
salvo chivarte del vecino desde el balcón. Te quitaron el trabajo, tu riqueza,
tus libertades, y no hiciste nada salvo ponerte un bozal de caniche histérico.
Te mintieron y les creísteis. Lo admitieron, te mintieron de nuevo, y les
volviste a creer. Te ponzoñaron una vez diciendo que te inmunizaba al 98%. Te
ponzoñaron por segunda vez asegurando que al 70% el rebaño estaría inmunizado.
Te ponzoñaron una tercera vez para reforzar el embuste en el que tú prefieres
creer. Ya vives en una sociedad de mayoría enferma: adolescentes con enfermeda-des
cardiacas de anciano, adultos de mediana edad que colapsan en mitad de la
calle, pata-tuses en la cola de paro, teleles pos ponzoñales, intoxicaciones
grafénicas, jamacucos mor-tales en las terrazas, deportistas de élite con salud
de perro callejero, ídolos pop que mueren en el escenario, niños neuro degenerados,
un exceso de mortalidad inexplicado en toda Euro-pa, dolencias mentales
recurrentes, depresiones por un tubo, coágulos e ictus por doquier, cáncer a
mansalva. Esta es la nueva normalidad: asumir que el infierno actual es normal,
y que el venidero resulta inevitable. ¿Estás preparado para lo que viene? Me
temo que no: el sacri-ficio de los pollos y robotizar el gallinero. ¿Te das
cuenta, pedazo de idiota?
Demos
crédito a la Historia e imaginemos a un guerrero inca que, de repente, se
encuentra enfrentándose a una extrañísima fuerza extranjera que lleva
misteriosos artefactos que hacen que, tras un estruendo, sus compañeros caigan
muertos al suelo. Él jamás había visto algo así. Identifica a los invasores
como demonios con corazas de espejo duro que vinieron del más allá, y a los
mortíferos artefactos que portan en ristre, los llama cerbatanas de truenos. No
puede compararlo con nada conocido. No sabe interpretar lo que está viviendo.
Sólo sabe que a su alrededor sus seres queridos están muriendo ensangrentados
de forma repentina; y que esos extraterrestres albinos están usando artes
mágicas para asesinarles. Su entendimiento no da para más. Toda su energía está
volcada en defenderse y sobrevivir a esa espantosa guerra. Jamás podría
asimilar que esos demonios invasores son, en verdad, conquistadores españo-les,
y que esas terribles cerbatanas no son otra cosa que espingardas. En poco
tiempo nuestro indígena imaginario estará muerto, y morirá sin saber quiénes y
con qué le han matado. El diferencial entre su civilización en colapso y el
nuevo orden impuesto es estrictamente tecno-lógico: los españoles conocen el
acero y la pólvora; él no, y fenecerá sin tener ni pajolera idea.
Echémosle más imaginación y supongamos las
conversaciones que este bravo indio mante-nía con sus compañeros guerreros
antes de la batalla. Unos decían que sus enemigos eran de raza semi divina;
otros que eran seres del inframundo provenientes del fondo del océano; otros
que eran enviados del dios Viracocha. Unos aseguraban que les habían visto
lanzar rayos por la boca; otros que tenían la piel más dura que el diamante, y
que, además, iban subidos en veloces criaturas cuadrúpedas nacidas en el
mismísimo infierno. Por mucho que especularan, su fantasía jamás iba a rozar la
realidad: esos feroces rivales tan solo eran un hatajo de espa-ñoles, gañanes
con mucha probabilidad, considerando lo gañanes que los españoles solemos ser.
Las únicas diferencias entre el soldado inca y el soldado español era que a
este último se le había introducido en la caballería, que le habían dado una
espada fuerte y ligera, y que le habían dotado de un peto y un casco de metal.
Aunque incas y españoles eran, en esencia, el mismo ser humano ignorante, el
acceso a la tecnología había trazado una línea divisoria entre dos humanidades:
una condenada a extinguirse, y otra que se adaptaba al nuevo paradigma jesuita,
en los ámbitos religioso (el cristianismo), político (el Vaticano), y militar
(básicamente que el que mata más y mejor, manda; y quien tenía la pólvora,
mataba y mandaba a su antojo).
Y ahora hagamos el tercer y más difícil
ejercicio de imaginación: multipliquemos siete veces cuarenta el impacto que
esta revolución tecnológica tuvo en aquel nuevo mundo del difuso siglo XVI, y
quizás así podamos hacernos una idea de lo que estamos viviendo hoy en día con
otra nueva tecnología militar, con implicaciones aún mucho más profundas. Se
trata de la neurociencia aplicada con técnicas basadas en la informática del
grafeno, abanderada entre otros por el también español y gañán, Rafael Yuste.
Desde la misma Universidad de Columbia en la que se desarrolló el Proyecto
Manhattan que dio a luz a la bomba atómica, las aplicacio-nes militares del
Proyecto Cerebro hacen que, en comparación setenta años después, Hiroshima se
quede en una mascletáfallera. Así como Robert Oppenheimer (el padre de la bomba
atómica) daba consejos de seguridad como presidente de la Comisión de Energía
Atómica después de la detonación de Fat Man, Rafita Yuste nos presenta a
finales de 2020 (al mismo tiempo que llega nuestra queridísima y esperada
ponzoña), los neuro derechos. ¿Los neuro qué? Los neuro derechos. ¿Y qué rayos
son los neuro derechos? Pues la crisis de conciencia de un científico civil
utilizado en la más monstruosa y abominable operación de inteligencia militar
llevada a cabo: el desarrollo e implementación en masa de interfaces no
invasivas, inyectables, que no requieren ni de cirugía ni de implantes, y que
fusionan el cerebro humano con redes informáticas. Si al lector le interesa la
informática lo mismo poco que a mí, se lo traduzco: el fin del libre albedrío
en el ser humano.
Y así termina esta humanidad: no con la
destrucción de sus cuerpos, sus ciudades, sus países, sino con computadores
destruyendo para siempre su libertad de pensamiento.
LA AGENDA
OCULTA DE LA ONU DETRÁS DEL CALENTAMIENTO GLOBAL CATASTRÓFICO
- David Skripac
La COP27, como todas las cumbres
climáticas anuales anteriores de la ONU, no abordó nin-guno de los problemas
existenciales reales que enfrenta la humanidad. En cambio, bombarde- aron con
un parloteo interminable sobre cómo el cambio climático inducido por el hombre
significará el fin de la humanidad si no se arrojan billones de dólares en esta
supuesta catás-trofe. Hubo el habitual llamado a la acción realizado por los
mismos asistentes a la cumbre de siempre, quienes imploraron a las naciones que
reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero de dióxido de carbono
antes de que sea demasiado tarde para salvar a la Madre Tierra. A ese
estribillo familiar agregaron una nueva nota: una proclamación de justicia climá-tica que se centró en la
necesidad de que los países ricos aumenten la inversión para el clima y el
desarrollo a la elevada suma de dos
billones al año. Pero, ¿podría toda esa palabrería sobre la catástrofe
climática y la justicia climática no ser más que una cortina de humo que
encubre un plan nefasto, un plan diseñado para monopolizar los recursos del
mundo en beneficio de unos pocos elegidos?
Antes de responder a esa pregunta, primero
repasemos algunos hechos reales sobre el cambio climático y cubramos las variables
que contribuyen a él. Primero, la pregunta que pro-bablemente esté en la mente
de todos: ¿Es real el cambio climático? Sí, lo es. Ha sido un fenó-meno
natural, normal e ininterrumpido desde que se formó la Tierra. En segundo
lugar, la pre-gunta corolario: ¿Ocurre como resultado de la actividad humana?
No, no es. Hasta la fecha, ningún
estudio científico ha atribuido positivamente todo o parte del cambio climático
obser- vado a causas provocadas por el hombre.
Por supuesto, existen numerosos modelos
informáticos que arrojan predicciones pesimis-tas. Pero, como todos los modelos
de computadora, sus resultados pueden ser manipulados por las variables
ingresadas en los algoritmos. Es decir, el programador puede ingresar ciertos
parámetros que permitirán un resultado deseado específico. El único propósito
de estos mode-los de computadora es presentar una apariencia pulida que parezca
ciencia creíble. En reali-dad, estos modelos ocultan la verdad y mantienen vivo
el engaño llamado crisis climática.
Un ejemplo de ello es el infame gráfico de
temperatura generado por computadora del palo de hockey producido por el
igualmente infame Michael Mann, profesor de ciencias atmosféri-cas de la
Universidad Estatal de Pensilvania. Después de su sensacional lanzamiento
inicial en 1998, el gráfico de Mann se incorporó al influyente Tercer Informe de
Evaluación del Cambio Climático de la ONU en 2001. Desde entonces, la
persuasiva ilustración ha sido utilizada por el Panel Intergubernamental sobre
el Cambio Climático de la ONU para engañar al público; en creer la teoría del
calentamiento global provocado por el hombre.
El gráfico del profesor Mann pretende mostrar la temperatura global
promedio durante los últimos 1.000 años. Durante los primeros 900 años, el
gráfico muestra muy poca variación en las temperaturas globales. Se extienden
en una línea tan recta como el eje de un palo de hockey sobre hielo que se
encuentra horizontalmente sobre su parte posterior. Entonces, de repente, en el
siglo XX, el gráfico mues-tra un aumento vertiginoso de la temperatura global,
pareciendo la hoja curva de un palo de hockey. Sin embargo, hay un gran
problema con el diagrama del palo de hockey: es pura fic-ción. En realidad, ha
habido numerosas etapas cuantificables de enfriamiento y calentamiento del
clima de la tierra a lo largo de los milenios. Aquí hay algunos ejemplos
notables:
•La Europa del siglo XIV estaba en una
mini edad de hielo, como lo revela un
artículo en Cli-mate in Arts & History. Durante la
Pequeña Edad de Hielo (1300/1850) las temperaturas globa-les fueron significativamente
más bajas, hasta 2°C, particularmente en América del Norte y Europa.
•Yendo más atrás, entre 1000 y 1350,
identificado como el Período de Calentamiento Medie-val, las temperaturas
fueron significativamente más cálidas que las actuales, y eso fue mucho antes
del período industrial. Más de 700 científicos de 400 instituciones en cuarenta
países han contribuido con artículos revisados por pares que proporcionan
evidencia de que el Período de Calentamiento Medieval fue más caliente que en
la actualidad y fue un fenómeno global, no solo una condición climática
regional europea, como especula erróneamente el IPCC.
•Yendo aún más atrás, hubo más períodos
cálidos, incluido un período prolongado durante la Edad del Bronce, conocido
por los geólogos como el Máximo del Holoceno (5000 aC/8000 aC). Durante este período, las
temperaturas eran significativamente más cálidas de lo que son hoy. De hecho,
un fascinante estudio realizado por Myers et al y publicado en The Cryosphere
Dis-cussions en 2020 concluye que las temperaturas promedio, especialmente en
la Antártida oriental, fueron 5°C más cálidas que en la actualidad.
Sin embargo, a pesar de haber aplanado
nueve siglos de variación climática con su progra-ma de computadora defectuoso,
el modelo de temperatura fraudulento de Michael Mann toda-vía está
siendo utilizado por el IPCC de la ONU. ¿Por qué? ¿Por qué el IPCC no
reconoce que el clima siempre ha cambiado, como lo demuestran los tres ejemplos
anteriores, y cambiado, eso sí, sin
ninguna ayuda de nosotros, los humanos?
Ahora, centrémonos en cómo los poderes
fácticos han culpado a la actividad humana por los ciclos climáticos naturales
y cómo han exagerado una catástrofe climática inventada que recuerda a la ropa
imaginaria del emperador de cuento de hadas. La teoría del calentamiento global
provocado por el hombre fue adoptada por primera vez en 1968 por el Club de
Roma en sus esfuerzos por promover la supuesta necesidad de reducción de la
población. Desde enton-ces, la ONU y otras organizaciones intergubernamentales,
así como los gobiernos nacionales de todo el mundo, lo han utilizado con gran
eficacia.
Los teóricos de ese calentamiento afirman
que el CO 2 producido por la actividad humana a principios del siglo XX debería
haber provocado el aumento de la temperatura de la Tierra. Insisten en que
existe una correlación directa entre el CO 2
y la temperatura global. A medida que aumenta el CO 2, la temperatura
global, alegan, aumenta al unísono. Pero, ¿es eso real-mente cierto? Bueno, si
aceptamos los hallazgos presentados por George S. Benton en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias
(octubre de 1970), surge una imagen sorprenden-temente diferente. Este intrépido científico descubrió que, en
los 60 años entre 1880 y 1940, la temperatura de la tierra aumentó aproximadamente
0,6°C. Esa tendencia al calentamiento tuvo lugar mucho antes de que se
inventaran los automóviles y los aviones. Además, en el mismo período, el
desarrollo industrial fue relativamente insignificante.
Luego, durante el auge económico
posterior a la Segunda Guerra Mundial en las décadas de 1950 y 1960, las
industrias se expandieron y la producción humana de CO2 se elevó a nue-vos
niveles. Según la teoría del calentamiento provocado por el hombre, la
temperatura global debería haber aumentado en esas décadas. Pero no fue así. En
cambio, cayó significativa-mente, entre 0,3°C y 0,4°C, durante tres décadas.
Estos hechos ciertamente no se
correlacio-nan con la teoría del calentamiento global.
En realidad, la atmósfera terrestre no comenzó
a calentarse en el siglo XX hasta 1975. Esta tendencia al calentamiento
continuó hasta 2016, cuando las temperaturas globales alcanzaron su punto
máximo; han ido disminuyendo desde entonces. ¿La prueba? Todos los conjuntos de
datos satelitales recopilados del Instituto Goddard de Estudios Espaciales
(NASA GISS) de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio, la
Oficina Meteorológica del Reino Uni-do, los Sistemas de Detección Remota y la
Universidad de Alabama muestran que las tempera-turas globales han disminuido
desde 2016 a pesar de las crecientes cantidades de CO 2 at-mosférico .
Si buscamos lo suficiente, podemos
encontrar artículos científicos que expongan estos he-chos concretos. Por
ejemplo, un informe de Chris Morrison en The Daily Skeptic nos informa que las
temperaturas en el Polo Sur ahora son las más frías desde que comenzaron los
regis-tros en 1957 y que el hielo marino del Ártico está regresando
silenciosamente. Y, sin embargo, todos
estos datos, inexplicablemente, han escapado a la atención de los reporteros de
los prin-cipales medios. Mientras tanto, numerosos alarmistas del cambio
climático, en particular el ex vicepresidente de EEUU, Al Gore, se aferran
desesperadamente a la idea de que existe una clara correlación entre el CO2 y la temperatura.
Estos cultistas del clima a menudo se
refieren a la evidencia recopilada de muestras de nú-cleos de hielo para
corroborar sus afirmaciones. A saber: en la década de 1990, la clásica muestra
de núcleo de hielo Vostok tomada en la Antártida oriental parecía mostrar
fluctuacio- nes de temperatura y carbono moviéndose al unísono. Con base en esa
muestra, los creyentes en el cambio climático provocado por el hombre trataron
de argumentar que a medida que aumentaba el CO, también lo hacía la
temperatura, sin demora entre las dos variables. Conven-cieron a las masas
científicamente analfabetas de que el CO2 influye en la temperatura.
COSAS RARAS
EN EL CIELO DE BUENOS AIRES
El miércoles de la semana pasada el
mediodía sin que se hubiesen producido lluvias o un exceso de humedad apareció
en el cielo de la ciudad de Buenos Aires una nube multicolor. Nadie lo
referenció.
VIDEO
NUBES
SE QUEDARON
SIN ARMAS
Los estrategas de la Casa Blanca están en
pánico: Ucrania e Israel están quitando recursos a Estados Unidos y empeorando
la posición de Estados Unidos en la competencia con China. Biden había
intentado centrarse en la confrontación con el Reino Medio pero ahora su
política sólo puede llevar a Estados Unidos a quedarse atrás de China.
El Pentágono ha actualizado las
proyecciones sobre las crecientes capacidades militares de China, que
actualmente tiene 500 ojivas nucleares en servicio y superará las 1.000 en
2030. De particular preocupación para Estados Unidos es el despliegue de
misiles hipersónicos DF-17 alrededor de Taiwán. El Pentágono está muy por
detrás en la carrera hipersónica. China está encargando submarinos y
destructores nucleares de próxima generación que rivalizan con las soluciones
estadounidenses.
En el contexto de la guerra en Israel,
China envió seis barcos para realizar ejercicios con Omán y Arabia Saudita.
Beijing está presionando a Estados Unidos y aumentando su presencia militar en
Medio Oriente para llenar el vacío dejado por los estadounidenses. Esto va de
la ma-no con la expansión económica.
Los
diplomáticos estadounidenses están enfrascados en negociaciones desesperadas
entre bastidores con Israel, Qatar e Irán, con la esperanza de impedir que
Hezbolá abra un se-gundo frente y resolver de alguna manera la cuestión de
Hamás. Pero en un contexto de debili-tamiento de la posición de Estados Unidos
en la región, estas negociaciones van muy mal.
China, por otra parte, se está preparando
para invertir cientos de miles de millones de dóla-res más en países árabes que
se han enfrentado a Estados Unidos, viendo una ventana de o-portunidad. Pero el
desafío más serio para Estados Unidos puede ser el conflicto sobre Taiwán en el
momento de las elecciones de enero: Washington no puede permitirse una tercera
gue-rra, ya que los arsenales del Pentágono se están agotando rápidamente.
En este contexto se deben analizar las
elecciones argentinas. El pueblo no elige nada, el sis-tema coloca a quien
mejor representa sus intereses en ese momento. Con el resultado sabre-mos que
tienen planificado para nosotros. Recuerden que hace cuatro años, dos meses
des-pués de asumir Alberto, nos dimos cuenta el motivo.
CONCLUSIONES
El plan del régimen toma forma; los
resultados de las elecciones confirman que ese es el plan, por eso la pseudo
oposición presentó como candidatos a un delirante que los últimos días se
encargó de pulverizar su caudal electoral con una muestra de soberbia, tanto de
él como de sus colaboradores. En mi opinión el cajón de Herminio Iglesias en
1983 lo dio Benegas Lynch cuando se metió con El Vaticano. Y los asesores de
Massa cuando publicaron el boleto de co-lectivo a $ 700 le asestaron un golpe
mortal.
En el caso de Juntos por el Cargo, la vieja
idea de despreciar a los radicales dándoles cargos de tercera línea les hizo
mudar su voto. Y esto es algo que ya hizo Mauricio Macri durante su gobierno;
por eso la soberbia es pecado capital.
Massa es el candidato de todos; del Fondo
Monetario, del Foro de Davos, de los BRICS, de los chinos; de la Agenda 2030.
El mismo que llevó Macri a Davos en 2016 y del que dijo la mis-ma Patricia
Bullrich en 2014: Su época es 2023;
lo que confirma que está todo arreglado desde hace cuarenta años.
Para lo que viene es mas de lo mismo; pero
el régimen siempre nos coloca como alternativa el abismo. Y esta vez el abismo
fue Javier Milei. El plan siempre da resultado. Entre el cáncer y el infarto,
la población parece que eligió por lo primero. Si esto se ratifica en el
balotaje, el rumbo económico no tiene salida; tarde o temprano se va de madre con
la inflación.
Para un análisis mas puntual hay que
esperar como se desarrollan los conflictos internacio-nales, en especial una
posible invasión China a Taiwan. El panorama está cambiando y, como aconteció
en 2020 con la pandemia, pronto sabremos que nos tiene deparado el régimen.
Nunca vi en una elección presidencial, si
bien no es definitiva, tan poca euforia como esta vez; es todo un síntoma que
lo puedo resumir en una frase: Voto para sacarme una loca, no para traer otro
loco. Massa, si sos presidente, serás el menos carismático de la historia.
Gana-rás con votos prestados, pero dos de cada tres no te votaron.,
