Desembarcan los marines –
Bases militares en Argentina
18 mayo,
2016
Macri
envió una delegación a Estados Unidos para acordar la instalación de una base
norteamericana en Ushuaia. La especialista del Cemida, Elsa Bruzzone, aseguró:
“El objetivo de Estados Unidos es obtener el control de todos nuestros recursos
naturales”.
Por Héctor
Bernardo
El
Gobierno de Mauricio Macri envió una delegación del Ministerio de Defensa a
Estados Unidos para acordar proyectos de cooperación militar. El más
polémico de ellos implica la instalación de una base norteamericana en Ushuaia,
Tierra del Fuego.
La
expansión militar norteamericana en el Cono Sur a lo largo de los últimos años
tuvo enormes proporciones. Investigadores como la periodista y escritora Stella
Calloni, el sociólogo Atilio Boron y la periodista Telma Luzzani han denunciado
el incremento de estas bases en varios de sus artículos y libros.
Desde el
Gobierno argentino aseguraron: “Queremos que la ciudad de Ushuaia se convierta
en una base logística para apoyar las tareas científicas en la Antártida”.
El
discurso de los funcionarios de Cambiemos es el mismo que ha permitido que
Washington genere una red de bases que rondan el centenar. Las excusas son
siempre altruistas: ayuda humanitaria, apoyo ante catástrofes, combate al
narcotráfico o apoyo al desarrollo y la investigación científica.
Elsa
Bruzzone, especialista en temas de geopolítica, estrategia y defensa
nacional y miembro del Centro de Militantes para la Democracia Argentina
(CEMIDA), aseguró: “Estados Unidos utiliza diversas excusas, entre ellas la de
‘ayuda humanitaria’ y ‘apoyó ante las catástrofes naturales’, para instalar
bases militares disfrazadas de bases científicas. Estas bases encubiertas
siempre las instalan en zonas donde hay recursos naturales altamente
estratégicos: agua, tierra fértil para producción de alimentos, minerales,
hidrocarburos, biodiversidad”.
“Además
de la base que quieren instalar en Ushuaia, también tienen la pretensión de
instalar una base militar en la zona de la Triple Frontera. Siguen con el
viejo proyecto de la instalación en la ciudad de San Ignacio, al oeste de la
provincia de Misiones. La intención es tener el control completo del Acuífero
Guaraní. Algo que ya quisieron hacer en Resistencia, Chaco, en el año 2012,
utilizando la excusa de ‘la ayuda humanitaria’. Pero la reacción de la
población chaqueña, más toda la actividad que desarrollamos desde el CEMIDA,
junto con el Ministerio de Defensa y la Cancillería, logró frenar ese
proyecto”, aseguró.
Bruzzone
remarcó que “lo que buscan es cerrar el cerco sobre todos los recursos naturales
que tenemos en nuestra América. Las bases militares, cubiertas y encubiertas,
que ha instalado en Centroamérica y el Caribe, sumadas a las que tienen en
Colombia, Perú, Chile, Paraguay, junto a la base militar de la OTAN en Malvinas
más el destacamento británico en las Islas Georgias cierran el cerco sobre
todos nuestros recursos naturales y reafirman su presencia en la Antártida”.
Por
último la especialista señaló: “No hay que olvidar que la Antártida es la
mayor reserva de agua dulce congelada en el mundo. Justamente en ese sector
es donde nos disputamos soberanía Argentina, Chile y Gran Bretaña. En la
Península Antártica se encuentran los mayores yacimientos de hidrocarburos de
la región y hay minerales altamente estratégicos que son indispensables para la
industria militar y la aeroespacial. El objetivo de Estados Unidos es obtener
el control de todos nuestros recursos naturales”.
Los
funcionarios de Cambiemos demuestran una vez más que sus medidas, lejos de
defender los derechos de los argentinos, representan los intereses de la Casa
Blanca. Cada día justifican más que el presidente Barack Obama se sienta tan
satisfecho con la presidencia de Macri.